Ante el incremento de ocupación hospitalaria en el estado de Veracruz, viene una tercera Alerta Preventiva por Covid-19, la cual estará vigente durante seis días, del jueves 28 de enero al martes 2 de febrero, con posibilidad de extenderse por más tiempo, dependiendo de los resultados que se obtengan, anunció el gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez.
En conferencia de prensa, dijo que ha habido un aumento en la demanda de camas en los nosocomios Covid y entraron nuevamente en función dos Centros de Atención Médica Expandida (CAME-19), el del puerto de Veracruz del Centro de Raqueta y el del Velódromo de Xalapa.
A pesar de este panorama, afirmó que aún se puede manejar la situación y negó que haya desabasto de oxígeno en los hospitales públicos; puntualizó que la nueva alerta, aplicable en 84 municipios más algunos ajustes pendientes, tiene como misión reducir la dispersión del virus y la ocupación hospitalaria para evitar que Veracruz vuelva al semáforo rojo (riesgo máximo).
Para lograr los objetivos, informó que a las medidas implementadas en las dos primeras alertas, consistentes en filtros sanitarios y cierre de centros históricos, se sumará la reducción del transporte público en todas sus modalidades y se aplicará una disminución en el pasaje del 50 por ciento.
Dio a conocer que las dependencias de Gobierno del Estado harán su trabajo de oficina en casa y exhortará a las dependencias federales y municipales para que también realicen “home office”, con porcentajes del 50 y 25 por ciento, dependiendo del lugar donde estén.
Apuntó que estas acciones ayudarán a evitar la movilidad y la concentración de personas en lugares cerrados.
Con respecto a los comercios, precisó que su actividad se rige bajo el decreto de regreso a la “nueva normalidad” publicado desde julio-agosto de 2020, cuya indicación es que están sujetos a la semaforización local.
En ese sentido, pidió también a los comerciantes que adquieran su código QR, el cual les garantiza a sus clientes que son lugares libres de contagio.
Enfatizó que las acciones preventivas son para no llegar a semáforo rojo, cuando solo están permitidas actividades esenciales.
EVITAR QUE VERACRUZ PASE A SEMÁFORO ROJO, EL OBJETIVO
Disminuir la dispersión del nuevo coronavirus y la ocupación hospitalaria son los objetivos de las autoridades sanitarias de Veracruz para la última semana de enero. La misión, evitar que la entidad pase de naranja (riesgo alto) a rojo (riesgo máximo) en el semáforo epidemiológico federal.
Y es que en rojo solo están permitidas al 100 por ciento las actividades esenciales, al 50 por ciento las estratégicas, al 25 por ciento los servicios y está suspendido todo lo relacionado con entretenimiento.
Así, de acuerdo con el decreto de la “Nueva Normalidad” para reactivación económica, únicamente está autorizado aquello relacionado con el sistema de salud, seguridad pública y protección ciudadana, así como distribución y venta de energéticos, gasolineras y gas.
Entre otras actividades que funcionan con aforos restringidos, está la adquisición de productos en supermercados, la cual opera al 50 por ciento, lo mismo que el transporte público.
Al 50 por ciento también laboran la industria metalmecánica y las agencias automotrices y talleres; sin embargo, las peluquerías, los hoteles, restaurantes y cafeterías, así como los cines, teatros y templos religiosos, solo al 25 por ciento.
En riesgo máximo, la indicación es no salir si no es estrictamente necesario y, como sucede en todos los colores, la recomendación general es mantener las medidas básicas de prevención: lavado frecuente de manos, uso de soluciones alcoholadas al 60 por ciento y portar cubrebocas.
También, limpiar y desinfectar las superficies y objetos de uso común; mantener distancia de metro y medio entre una persona y otra, cuando se está fuera de casa, así como toser o estornudar en el ángulo interno del codo.
El gobernador del Estado, Cuitláhuac García, anunció la tercera Alerta Preventiva por Covid-19, vigente del 28 de enero al 2 de febrero, el exhorto a la población es cuidarse y actuar con responsabilidad para no llegar a las medidas restrictivas mencionadas, las cuales no convienen ni ala vida pública ni a la economía.