Luego de que la Contraloría General del Estado, desechara la denuncia que presentó en contra del Secretario de Salud, Roberto Ramos Alor, por violencia política de género, la diputada local, Anilú Ingram Vallines, dio a conocer que acudirá a instancias internacionales para continuar dar continuidad a su queja.
La legisladora indicó que no se detendrá y acudirá a la Comisión Nacional de Derechos Humanos o la misma Organización de las Naciones Unidas, ya que el actuar del funcionario es una muestra de la violencia contra las mujeres.
“Si en esa instancia no encontramos eco, no actúan apegados a los protocolos, porque lo hacen de pura retórica, porque no se apegan a los hechos, tenemos que acudir a organismos internacionales, eso fue real, nadie lo inventó, está a todas luces, es la realidad de la violencia política que es ejercida”, dijo.
Consideró lamentable que desde la Contraloría del Estado, se mencione que no se cuenta con elementos para continuar con la investigación, cuando se trató de un asunto público.
“Es bien lamentable, porque fue un asunto público, es lamentable que no actúen y más que lo diga una mujer, me parece vergonzoso”, expuso.
Asimismo, afirmó que las denuncias que presentó ante la Fiscalía General del Estado, en el Organismo Público Local y otras instancias van lentas, “yo quisiera ser respetuosa de lo que están haciendo, pero no se han visto avances”.
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“Es lamentable que las mujeres en cargos públicos no estén actuando ante las denuncias, desde que se interpuso la queja hubo una descalificación, pero lo que se ve no se juzga, ahí están los videos, no lo inventa uno”, expresó.
En diciembre pasado la legisladora acudió a la Fiscalía, al Organismo Público Local Electoral (OPLE), al Tribunal Electoral de Veracruz (TEV) y ante la Contraloría General del Estado (CGE), para denunciar actos relacionados con violencia política en su contra de parte de Ramos Alor.
La legisladora manifestó que el funcionario público, marcó como estereotipo “que las mujeres valemos o no por razón de donde nos vestimos o cómo lo hacemos, al referirse a la frase utilizada en una tienda departamental y, por otro lado, el hecho de colocar un lenguaje que reproduce la violencia feminicida que se vive en el país y en el estado utilizando la expresión ‘antes muertas que sencillas’, por lo que exigimos una sanción”.