“Si no se van a morir de una cosa, se van a morir de otra” aseguró la presidenta municipal de Xico, Gloria Galvan Orduña a las críticas sobre las aglomeraciones que se registraron la noche de ayer domingo en el municipio debido a la inauguración de la Villa Iluminada. Entrevistada a su llegada al Congreso Local, la funcionaria municipal precisó que la economía en el municipio no se puede detener y que, a casi un año de la parálisis ocasionada por el Covid-19 está “a punto de colapsar”.
“Los que tenemos un salario pues a lo mejor no pasa nada pero las personas que van día a día están a punto de colapsar y vamos a tener otros problemas muy diferentes, puede haber más delincuencia y bueno, si no se van a morir de una cosa se van a morir de otra”, expuso.
Galván Orduña aseguró que la sociedad tiene que aprender a vivir y que existe una corresponsabilidad en este tipo de actos en los que todos deben contribuir. La vida no se puede detener, la vida va a seguir y pues ojalá espero que entiendan”¡
Dio a conocer que el ayuntamiento a su cargo cuenta con una carta de empresarios y ciudadanos en los que le expresan su preocupación ante la posibilidad de cerrar sus negocios. “Tenemos que usar cubrebocas pero eso no es algo que les tenga que obligar, es una corresponsabilidad (...) espero que puedan entender, está a punto de colapsar la economía, yo hablo de la de Xico”.
Cuestionada respecto al número de personas que se congregaron la noche del domingo a presenciar la inauguración de la Villa Iluminada de Xico, la alcaldesa expuso que hasta el momento no tiene las cifras del número de asistentes y reiteró el llamado al resto de la población “a ponerse en los zapatos de los que menos tienen”.