La lluvia ácida se come la zona arqueológica de El Tajín

Junto con las condiciones climatológicas y las acciones vandálicas, han afectado estéticamente a la antigua capital del mundo totonaco

Karla Cancino

  · domingo 24 de marzo de 2019

Foto: René Corrales


Papantla, Ver.- La caída de lluvia ácida, las condiciones climatológicas y las acciones vandálicas han causado afectaciones estéticas a las estructuras de la zona arqueológica de El Tajín, ubicada en el municipio de Papantla.

En entrevista, Temachtiani Atenco Sánchez, arqueólogo encargado de la protección técnica y legal de la zona, dio a conocer que aunque los daños que tienen estos espacios no ponen en riesgo su estructura, sí le afectan de manera estética.

El especialista precisó que por tratarse de un conjunto de edificios al aire libre es muy fácil que se vaya deteriorando y aunque se intenta realizar el mantenimiento necesario, toda obra de conservación requiere de recursos económicos.

Foto: René Corrales

Dio a conocer que los últimos espacios que recibieron mantenimiento fueron las esquinas de los juegos de pelota que estaban padeciendo daños por la lluvia ácida, sin embargo, aún se requiere intervenir la Pirámide de los Nichos, espacio más emblemático de esta zona.

Vino una restauradora de la Ciudad de México y se les aplicaron (a los juegos de pelota) unas técnicas de restauración y de conservación para que se evitara el deterioro y parece que han servido las intervenciones y se pretende seguir trabajando con la Pirámide de los Nichos y algunos otros daños, pero se necesitan recursos para ello y estamos gestionándolo

Foto: René Corrales

Atenco Sánchez añadió que la creación de microorganismos también afectan los edificios de la zona y de manera general todos ellos tienen presencia parasitaria, pero ya se está gestionando un proyecto general para su retiro de las estructuras.

Por cuanto hace a los daños causados por los visitantes el encargado de la protección técnica y legal de la zona arqueológica dio a conocer que es común que por gracia, ocio o por quererse llevar "un recuerdito" terminan afectando las estructuras o rayándolas. Indicó que cuando son interceptadas se les lleva ante las autoridades y se les obliga que paguen el daño causado a los inmuebles.