Veracruz, Ver.- Lo que inició como el llamado a la solidaridad para apoyar con un plato de comida a quien lo necesitara en tiempo de pandemia, se convirtió después de un año en un proyecto de altruismo consolidado en la ciudad de Veracruz.
“Hacemos que Suceda” es el nombre de lo que hoy es el comedor gratuito ubicado en la colonia Ortiz Rubio de la ciudad jarocha, en donde la familia Zayas Manjarrez entrega diariamente un plato de comida caliente a quien lo necesita.
Moisés Arturo Zayas Manjarrez, responsable y fundador del proyecto, detalló que, desde el 7 de abril del 2020 a la fecha, se han entregado 25 mil platos de comida a personas que se quedaron sin empleo o que viven en situación de calle.
En el comedor se busca ofrecer un platillo completo, integrado por con un guiso de carne con verduras, arroz, frijoles y aguas frescas de fruta de la temporada, para brindar una opción nutritiva a las personas beneficiadas.
Del mismo modo, indicó que se busca que sea un plato abundante, para que las personas puedan tener una dieta balanceada que cubra sus necesidades de alimentación al menos durante ese día que acuden.
“Empezamos el 7 de abril del 2020, empezamos como un apoyo para las personas que por la pandemia se quedaron sin trabajo, después, con el tiempo lo adoptamos como proyecto a largo plazo, hemos entregado a la fecha más de 25 mil platos de comida”.
En un inicio, el proyecto daba ayuda a personas que se quedaron sin trabajo por la pandemia, quienes acudían con sus familias por un plato de comida, hubo otras ocasiones en la que empleados sin ingresos fijos como taxistas, llegaban al sitio.
La voz se fue pasando entre las personas y comenzaron a llegar indigentes o personas que no tenían ingresos ni familia para que los ayudara.
De las personas que visitan el comedor “Hacemos que Suceda” al menos 60 por ciento son personas sin hogar que viven en la calle y alrededor del 40 por ciento son adultos mayores que se quedaron sin alguien que los ayude.
En el punto más crítico de la pandemia, en el comedor se brindaba ayuda a unas 100 personas todos los días, la cifra actualmente disminuyó a unas 70 personas diarias.
En parte debido a que la crisis de desempleo se ha venido atenuando, en parte porque otras agrupaciones civiles retomaron actividades o porque otras personas se inspiraron en esta buena acción para ayudar en otros puntos de la ciudad.
“En promedio antes venían unas 100 personas, el año pasado hubo un día que tuvimos 170 personas, pero actualmente la cifra varía entre 60 y 70 personas las que vienen con regularidad para que los ayudemos”.
Moisés Arturo Zayas detalla que actualmente el comedor abre de lunes a viernes, recibe a los beneficiarios entre 1 y 2 de la tarde, pero las labores para cocinar la comida inician desde temprano, con la selección de los ingredientes.
De manera diaria se gastan unos mil pesos, entre los cuatro kilogramos de carne, la abundante verdura, los granos básicos como arroz y frijol, aceites y demás ingredientes, además de los insumos que incluyen el pago del salario de un trabajador.
Aunque se trata de un gasto elevado, destaca que existe mucha ayuda de la sociedad civil, que desde el inicio se sumó a la causa ayudando con donaciones en especie.