Por más de 28 años don Heliodoro Cruz Sampayo, originario de Huauchinango, Puebla, ha venido a Xalapa cada diciembre para vender árboles navideños, pero en todo ese tiempo nunca había tenido que regresar sin haber logrado venderlos todos.
Parado en la avenida Xalapa, de esta ciudad, a la altura de la Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”, comenta un poco afligido que este año las ventas fueron realmente malas, “creo que hubo demasiada competencia”.
Ante la situación ya puso su anuncio de que remata en 500 pesos los árboles que le quedaron. “Es mejor darlos a un costo más bajo que pagar para que se los lleven al basurero”.
Comenta que como cada año trajo unos 400 pinos navideños a Xalapa. “Desde hace más de dos décadas traigo la misma cantidad y siempre había terminado todos y en menos días”.
En esta ocasión trajo especies como oyamel, pino natural y el Douglas que son de origen canadiense. Cuando comenzó la vendimia los tenía en mil 200 pesos, porque visitó los supermercados y se dio cuenta que estaban en mil 500 pesos, pero eso no lo ayudó.
Ahora los ha bajado de precio porque mañana regresará a Puebla a disfrutar de las fiestas con su familia, “aunque debo aceptar que las pérdidas económicas si me afectarán el festejo”.
Remarca que llegó a Xalapa con seis ayudantes “y todos estamos tristes porque gastamos mucho en nuestro hospedaje y alimentación y pese a que llevamos dos semanas nos quedan por vender unos cien árboles que ahora andamos buscando acomodar a un precio mucho más bajo”.
A unos días de celebrar la Navidad, dice que todavía hay familias que buscan comprar sus pinos, “pero pues si ya sabemos que ya son pocos los que vendrán a comprarnos”.
“Estamos tristes y achicopalados porque venimos a trabajar cada año y no ganamos lo necesario porque hicimos una inversión para adquirirlos en el Estado de México y en Puebla, pero esperamos que el año que viene nos vaya mejor”.
“Si no los vendo, pues veré a quien se los dono, porque sale más caro llevarlos, así que esperemos sacarlos”, concluyó.