Veracruz, Ver.- A Nayeli Paunic Santos Zamudio nadie la enseñó a cocinar, aprendió la elaboración de postres y alimentos con ayuda de videos y tutoriales para iniciar con su emprendimiento con miras a tener su propia cafetería.
¿Cómo inició con su emprendimiento en Veracruz?
La joven de 23 años relata que desde la secundaria empezó con la venta de dulces, todo con el objetivo de generar dinero y comprarse sus cosas sin tener que pedirles a sus padres.
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La venta de dulces resultó exitosa pero sus compañeros tenían hambre y querían algo más.
“Desde chica me ha gustado vender cosas para tener mi propio dinero, empecé vendiendo dulces, iba a las tiendas a comprar y revendía en la escuela, pero mis amigos me decían que tenían hambre de comida que los alimentara, no dulces”, expresa.
Posteriormente empezó a preparar tortas de pierna, no tenían mucha ciencia y era algo fácil de hacer, pero también quiso hacer más cosas que le dejaran dinero.
“Después de los dulces empecé con las tortas de pierna, pero también empecé a hacer hojaldras, banderillas, galletas, pay, te diré que en mi mochila más que libros cargaba con postres, algunos ya iban de pedido y otros los ofrecía, ya estaba en la prepa y me empecé a hacer de mis clientes”, dice.
Al terminar la preparatoria, se inclinó, en un principio por estudiar la licenciatura en Derecho pero como quería estudiar los sábados tenía que pasar cerca de 10 horas tomando clases en un solo día, lo cual se imaginó muy complicado.
Al final optó por estudiar la licenciatura en Gastronomía, que era algo que ya venia haciendo y que también disfrutaba pues asegura que fue nato ya que en su casa nadie la enseñó a cocinar, todo lo aprendió a través de tutoriales y videos y con el dinero que generaba se iba pagando la carrera.
“Como ya estaba muy dedicada al negocio, pensé en estudiar los sábados, y la carrera que me llamaba la atención era derecho pero me imaginé que iba a ser muy pesado estar tantas horas en algo teórico así que me decidí por gastronomía, ya estaba muy metida en lo de la cocina y era una mejor opción, echando a perder se aprende porque realmente a mí nadie me enseñó a cocinar”, puntualizó.
Con los estudios en gastronomía, perfeccionó técnicas de elaboración de postres y se dio ánimos para emprender el negocio como tal con apoyo de las redes sociales ofreciendo todo tipo de platillos.
Menciona que su hermana la ayudó con el diseño de su página y el nombre de su negocio.
Ahora la meta es tener su propia cafetería, sin embargo, reconoce que se trata de un proyecto que requiere mucho dinero.
“Mi sueño es tener mi propia cafetería, siempre he querido ser mi propia jefa, nunca depender de nadie, la carrera de chef me costo y el trabajo es mal pagado así que quiero tener lo propio, que diga es mío y voy por la cafetería, estoy trabajando mucho y ahorrando porque necesito dinero para cubrir los gastos”, manifiesta.
Aún no tiene carro y transporta sus alimentos en cajas pero afirma que todos los días le echa muchas ganas para ofrecer sus productos a través de redes sociales y participando en expos y ferias de emprendedores para seguir ganando clientes que la ayuden a consolidar sus sueños.