Ninguna persona puede sentirse más que otra, todos somos pecadores: Reyes Larios

Hizo un llamado a todos los feligreses para que sean humildes y eviten creer que tienen mucho más valor que sus semejantes

Itzel Molina | Diario de Xalapa

  · domingo 27 de octubre de 2019

Foto: David Bello

XALAPA, Ver.- El arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, hizo un llamado a todos los feligreses para que sean humildes y eviten creer que tienen mucho más valor que sus semejantes.

En la homilía dominical, señaló que ninguna persona puede sentirse más que otra, pues todos somos pecadores y como tales debemos dirigirnos con humildad en todo momento.

Debemos recordar que el que se humilla será enaltecido y el que se enaltece será humillado, Dios nos ve a todos por igual y todos somos pecadores

Ante cientos de feligreses que se reunieron en la Catedral Metropolitana de Xalapa para participar en la celebración de la misa del mediodía, Reyes Larios expuso que a Dios no le agradan las personas que con el pensamiento, la palabra y la omisión afectan a otros.

Cuando empezamos la misa pedimos perdón por nuestros pecados, con el pensamiento pecamos, ofendemos, echamos culpa a las personas. Nuestro pueblo cuenta con muchas palabras altisonantes, eso sería lo de menos, sino que se hacen de una forma ofensiva y al decir que pecamos por omisión es ante las acciones que cometemos y no reconocemos

Recordó que cada individuo tiene el pecado original por ser hijo de Adán y Eva, además de los pecados personales que se cometen diariamente.

Ante ello, pidió realizar un examen de conciencia y reconocer todos los pecados que se han cometido, algunos de ellos para dañar al hermano.

El arzobispo mencionó que los pasos para una buena confesión son: hacer un examen de conciencia, tener dolor de los pecados, lograr el propósito de enmienda, decir los pecados al confesor y cumplir con la penitencia que se haya encomendado.

Debemos siempre dirigirnos a Dios con una oración siempre humilde y sencilla, con el reconocimiento de que nosotros somos criaturas y que estamos manchados por el pecado original y pecados personales. Dios escucha a todos, por eso debemos tener plena confianza de que tendrá misericordia