No habrá tanta flor de muerto este año

Quienes se dedican al cultivo de esta flor, aseguran que debieron hacer uso del riego para poder lograr el crecimiento de la planta, pues las lluvias tardaron en llegar

Itzel Molina | Diario de Xalapa

  · jueves 17 de octubre de 2019

Foto: Jaime Rivera

San Pablo Coapan (Naolinco), Ver.- Durante el mes de octubre los campos de este pueblo se visten de naranja, gracias al cultivo de la flor de cempasúchil, pero este año las flores han retrasado su proceso porque las lluvias llegaron un poco tardías.

Quienes se dedican al cultivo de esta flor, representativa en los festejos de Día de Muertos, aseguran que debieron hacer uso del riego para poder lograr el crecimiento de la planta, pues las lluvias tardaron en llegar.

Pese a que desde los primeros días de octubre los campos deben observarse completamente naranjas, la mayoría es verde, pues las flores permanecen en botón.

La esperanza de quienes sembraron esta flor, que cada año es vendida a compradores que acuden hasta los terrenos, es que a partir del día 15 empiecen a abrir los botones, de lo contrario no podrán ofrecerla.

De acuerdo con Isabel Carmona González, jefa de familia que por más de 50 años se ha dedicado al cultivo de esta flor, el corte del cempasúchil empieza el día 26 de octubre y concluye el primero de noviembre, por lo que todavía se tiene tiempo para poder obtener una producción que deje lo necesario para pagar los gastos generados por la cosecha.

En su caso, su hijo Régulo Ortega Carmona es quien se encarga de producir esta flor y asegura que este año debieron hacer el riego con regadera directa para que la planta creciera.

Las lluvias no llegaban, entonces se tuvo que ir a regar cada plantita para que crecieran, hubo quienes no lo hicieron y por eso sus flores no han salido, las de nosotros sí crecieron y algunas ya están listas, pero porque no esperamos que viniera la lluvia, nos adelantamos a eso

Indicó que la planta es de “aguante”, pero no se puede producir si se carece de lluvias o los vientos otoñales la derriban, motivo por el que algunos productores decidieron cambiar esta cosecha por maíz o caña.

“Ésta es una planta que se da sólo en esta temporada, por eso debe cuidarse porque de aquí sale algo (dinero) para poder mantener a la familia; este año hay muy poca producción, yo creo que les faltó regarla, así como nosotros lo hicimos, otros sembraron caña o maíz porque dijeron que no iba a nacer”, expuso.

Explicó que para lograr el cultivo se requieren por lo menos cuatro meses de trabajo, tiempo en el que se hace la siembra, limpia y finalmente el corte.

Para poder realizar la siembra se guardan algunas plantas que se utilizan como semillas, ya que al secarse se desbaratan y se riegan en el terreno esperando que llueva en los días seguidos para que nazca rápidamente. En este caso, se debieron regar para lograr el crecimiento de la planta.

Tras ello, se espera y confía que el terreno sea fértil para que las plantas pronto nazcan y puedan ser comercializadas.

Desde julio pasado se hizo el vivero, durante agosto se realizó el trasplante y durante septiembre se llevó a cabo la limpieza del terreno para que la flor pueda cortarse.

El costo actual que tendrá esta flor se desconoce; sin embargo, el año pasado una hectárea se podía vender hasta en 4 mil pesos o bien rollos pequeños desde los 18 pesos.

“Antes era muy barato los rollos chiquitos se vendía a 50 centavos, ahora cuestan como 18 pesos, nosotros esperamos tener suerte y que gracias al riego podamos obtener una cosecha buena; no a todos les irá bien, pero esperamos que esto no se acabe porque es una bonita tradición”, manifestó.