Xalapa, Ver.- Ya sea por la vanidad de querer ver su auto siempre mejor o por motivos sentimentales al haber pertenecido a su padre o abuelo, los coleccionistas de autos invierten en éstos prácticamente su vida.
Platicó que el problema es que ninguna compañía los quiere asegurar por el valor que tienen actualmente, ya que en el libro azul, un Maverick 1976 está valuado en 20 mil pesos, cuando en realidad vale alrededor de 325 mil pesos.
Desde 2006, el xalapeño César Reyes López tiene un Ford Maverick 1976, el que ha tratado a lo largo de los años de conservar como originalmente fue, pues entonces no todos eran iguales como hoy.
Mantener o conservar un auto lo más originalmente posible se puede llevar años, ya que con el paso del tiempo y el cambio de dueños van perdiendo sus piezas originales, señaló Reyes López.
Compartió que él desde niño inició en Xalapa con el cuidado de los automóviles, inducido por el gusto de su padre, Félix Reyes Rodríguez, y posteriormente por su hermano Saúl.
El tesorero de la asociación civil Escudería Maverick con sede en la Ciudad de México recuerda que el Maverick había estado arrumbado durante dos años, cuando su hermano Saúl lo compró y empezó a restaurarlo.
Señaló que le pusieron rines originales, le compusieron el motor, el radio y ahora a lo largo de los años le cambiará los asientos como eran cuando el carro salió de la agencia.
Es una constante inversión, para muchos de los socios es a veces un tema de vanidad, pero para algunos otros conservar un auto como fue originalmente, hasta del mismo color, se debe a que así fue el de su padre o abuelos. Incluso hay quienes conservan los que fueron de sus abuelos. Son autos que han pertenecido a una sola familia.
En la actualidad posee también un Volkswagen 1983 y un Cadillac 1968, que le han enseñado que es preferible tener solo uno y no tratar de invertir en tres.
Su objetivo es que los autos se conserven como originalmente eran y su satisfacción es mostrarlos en exposiciones y meterlos a concursos donde los jueces evalúan qué tan bien conservados están, la pintura y sus piezas originales.
Otro de los problemas con el que se ha topado es que desde que empezaron a salir los programas de restauración de autos en diversos canales, las piezas originales de segunda mano que antes se encontraban aprecios relativamente bajos se encarecieron mucho.