La nueva etapa en materia de fiscalización impone grandes retos a las entidades de fiscalización superior locales del país, constituyéndose el Sistema Nacional de Fiscalización como un pilar en la lucha contra la corrupción al considerar a la auditoría gubernamental como un elemento de suma importancia en esta actividad, informó Lorenzo Antonio Portilla Vásquez, auditor general del Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz.
La Ley Número 364 de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas del Estado de Veracruz, señaló el servidor público, impone nuevos retos en los tiempos de la fiscalización a las cuentas públicas. “Contempla que el Orfis inicie sus facultades desde el primer día hábil del ejercicio fiscal siguiente y que el Informe del Resultado, que contiene las conclusiones técnicas y el resultado de la fiscalización, se entregue al Congreso del Estado a más tardar el primer día de octubre del año de la presentación de las cuentas públicas correspondientes”, expresó.
Esta circunstancia obliga al Orfis a realizar una planeación y programación de las auditorías con suficiente anticipación respecto del momento en el cual se reciban las cuentas públicas para su revisión. Así, el procedimiento de fiscalización debe de realizarse de manera eficiente, optimizando los tiempos necesarios para concluir las revisiones, así como la elaboración de los informes correspondientes.
De igual manera, la competencia que se atribuye a las instancias fiscalizadoras en materia de responsabilidades administrativas es fundamental, toda vez que derivado de las irregularidades que se detecten con motivo del ejercicio de sus facultades de fiscalización, se logrará la detección de las faltas graves cometidas por los servidores públicos, con el fin de realizar los procedimientos correspondientes de investigación y substanciación, a efecto de que el Tribunal Estatal de Justicia Administrativa, proceda a la imposición de las sanciones correspondientes.
El auditor general manifestó que el rol que desempeñarán las entidades de fiscalización superior locales como integrantes de los sistemas locales anticorrupción y su adecuada coordinación, respetando sus ámbitos de competencia, con las autoridades que llevan a cabo el control interno a nivel estatal y municipal, permitirán ampliar la función fiscalizadora.
Lorenzo Antonio Portilla Vásquez refirió que los resultados en materia de fiscalización superior dependerán en gran medida de contar con un marco jurídico robusto. “La ciudadanía espera y exige resultados en la lucha contra la corrupción y éste es el reto más importante al que todos tendremos que enfrentarnos, pues sólo con resultados lograremos construir y mantener la confianza y la participación activa de los ciudadanos”.