Desde el campamento de la avenida Lázaro Cárdenas, con el que se pretende evitar la tala de árboles, activistas y ciudadanos señalaron que las autoridades y la empresa responsable de la construcción del paso superior vehicular cayeron en desacato, porque la suspensión federal que impedía la continuación del proyecto está vigente.
En conferencia de prensa se recordó que el amparo 710/2023/A está vigente, por lo que la empresa no debió dar continuidad a las acciones que forman parte de la edificación de este puente que se pretende construir a la altura de la plaza Urban Center.
Ante la continuidad de las acciones de construcción, el equipo legal del campamento presentó ante la justicia federal un recurso de desacato contra la empresa a cargo de la obra.
¿Cuántos amparos existen y cuál es el objetivo?
A unos cuantos metros del lugar en donde se ubica la maquinaria que lleva a cabo las acciones de construcción, se recordó que se cuenta con tres amparos que tienen el mismo objetivo: evitar la tala y detener la obra. Dos de éstos amparos están en revisión y uno, el 710/2023/A fue otorgado de manera provisional y se encuentra vigente.
Fue el pasado 17 de julio que se implementó este campamento, por lo que desde hace más de 500 horas ciudadanos y activistas emprendieron la lucha contra la tala de los árboles.
¿Cuántos árboles fueron talados para la construcción del paso superior vehicular?
Lo anterior, luego de que fueran talados 49 árboles para la ejecución de la obra que forma parte del Plan de Movilidad para Xalapa y con el que las autoridades pretenden favorecer el tránsito por la vía que es utilizada por vehículos locales y foráneos.
Al respecto, Rafael, vocero del campamento, recordó que el amparo señala que la empresa debe abstenerse de cortar o remover cualquier tipo de flora y, en tanto no se obtenga una resolución definitiva, no tiene que continuar la obra.
“El equipo legal ya notificó el desacato de la empresa, se están realizando las acciones legales pertinentes, lo que estamos pidiendo es que, si la obra pretende continuar a pesar de que está el amparo, se tiene que modificar el proyecto, pero sigue el mismo”, dijo.
Destacó que para la realización de esta obra no se realizó una consulta previa y no se consideró la voz de los ciudadanos.
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Manifestó que por el inicio de la obra fueron talados 49 árboles que brindaban servicios ambientales.
“No se está haciendo una correcta evaluación, hay urbanistas que mencionaron que puede haber otra alternativa, incluso la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas reconoció que se podía hacer otra alternativa sin el derribo de árboles, reconocemos que ante esta contrariedad es un capricho lo que se está manifestando en la obra, recordemos que la movilidad no sólo es construir puentes, ya que las calles se ven invadidas por automóviles, necesitamos una planeación para movilidad y la pacificación urbana”, expresó.
Por su parte, Yessenia, integrante del campamento, realizó una petición a las autoridades para generar un diálogo con los ciudadanos.
“No ha habido un diálogo, la única política que maneja el plantón es la de la participación, de acuerdo al Manifiesto de Impacto Ambiental se tenía contemplada la tala de más de 403 árboles, arbustos y otro tipo de vegetación. No se realizó una consulta previa a la obra, se pudo implementar el Hoy no circula o reducir los altos costos de un libramiento que ya existe”, comentó.
¿Es positiva la construcción del paso superior vehicular?
Puntualizó que las autoridades señalan que el puente generará acciones positivas; sin embargo, los árboles proporcionan servicios ambientales que el cemento no tiene.
“Se dice que el puente logrará 14 mil toneladas al año de captación de emisiones de dióxido y los árboles captaban 14.3 toneladas, pero el puente no realiza los otros servicios que hacen los árboles que es el control del suelo, erosión y emisión de oxígeno”, dijo.
Ante ello, lanzaron las siguientes preguntas a las autoridades, pidieron establecer un diálogo, eliminar la vigilancia y la amedrentación de la que han sido víctimas de parte de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.
“¿Por qué validar la inmediatez de la ejecución de la obra antes que la escucha y el cuidado de la población y el entorno?, ¿A qué nivel se está priorizando el auto y su movilidad cuando se nombra como un proyecto público mayor?, ¿Por qué la niñez y ciudadanos que habitamos y transitamos sin vehículos y sufrimos las políticas públicas no estamos teniendo un canal de escucha, decisión y represión?, ¿Por qué no tenemos mesas de trabajo, foros y herramientas para expresar nuestra postura?, y ¿Los árboles sembrados en qué tiempo darán un impacto ambiental?”, cuestionaron.