Perros guías son una herramienta de trabajo, no un lujo: Fernando Apan habla de su experiencia

En el artículo 58 de la Ley Federal del Consumidor se menciona que el perro guía es herramienta de trabajo y no un lujo

Ricardo Martínez/ Diario de Xalapa

  · martes 20 de agosto de 2024

Fernando siempre camina junto a “Sadie”, perra guía que lo acompaña desde hace 6 años y que se encuentra certificada con chip y con documentos oficiales | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa

La falta de capacitación del personal y el desconocimiento de la ley siguen siendo impedimento para que personas ciegas entren a restaurantes en compañía de su perro guía, pese a que estos animales son considerados como “herramientas de trabajo” y no una mascota, dijo el músico Fernando Apan.

Ciego de nacimiento, Fernando siempre camina junto a “Sadie”, perra guía que lo acompaña desde hace 6 años y que se encuentra certificada con chip y con documentos oficiales, no obstante a ambos se les ha impedido el paso a algunos sitios como restaurantes o aeropuertos.

¿Qué dice la ley sobre los perros guía para personas ciegas?

Sobre el respaldo legal, explicó que artículo 58 de la Ley Federal del Consumidor habla sobre la inclusión, la orientación sexual, la religión e incluso la discriminación racial y allí se menciona que el perro guía es herramienta de trabajo y no un lujo.

“Entonces se tiene que diferenciar entre un perro de asistencia y uno normal, ya que la ley dice que se puede acceder a interiores como hoteles, a transportes públicos como autobuses o aviones; con excepción de zonas de cocina donde se preparan alimentos o quirófanos”.

Asimismo puede entrar a eventos recreativos, de trabajo e incluso salas de hospitales: “Si tengo una cita médica sí puedo entrar a la sala de espera, ya que el perro guía es los ojos de la persona y no se puede separar de su amo”, insiste.

El músico xalapeño cuenta que la gente de los negocios le ha llegado a cuestionar el por qué lleva un perro si va acompañado de amigos o familia, pero él responde que si necesita ir al baño o tiene que hacer algo personal necesita su propia ayuda, ya que “una vez que el perro guía entra a tu vida no se separa de ti hasta que se hace viejito o se muere”.

Estos animales deben ser considerados como “herramientas de trabajo” y no una mascota | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa


Casos de discriminación a perros guías

Fernando Apan recordó que en el aeropuerto de la CDMX le impidieron el acceso: “El problema fue con la Sagarpa, ahora Sader; me quisieron obstaculizar para viajar con ‘Sadie’ pese a que ella tiene su chip y documentos. Al final el director se portó bien y hablamos con todos los operadores de todos los aeropuertos; luego hubo una reunión con el Colegio de Perros Guías de México y eso fue un parteaguas, pues ahora cualquier persona es admitida y puede abordar”.

Admitió que no siempre se logran acuerdos, pues en un establecimiento de venta de tortas y carne en Córdoba “le tronaron los dedos” y lo corrieron del sitio.

“La dueña me discriminó por el perro; llegamos a palabras y grabamos el evento. Como los acusamos con las autoridades y logré eco en la población que se solidarizó, en lugar de disculparse estas personas dijeron que yo me dedicaba a extorsionar negocios”.

“Sadie” es la perra guía que lo acompaña desde hace 6 años y que se encuentra certificada con chip y con documentos oficiales | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa

Enfatizó en que lo que menos busca es la confrontación: “Con el amor todo se puede, con amabilidad; yo lucho por mis derechos, los de mi perra ‘Sadie’, pero también los de otros; a mí me interesa que cuando llegue otra persona con discapacidad en silla de ruedas o muletas no sea discriminado; que abramos camino”.

Expresó que fueron a la Fiscalía a interponer una denuncia, pero “es la hora que no nos hablan y no pasó nada. Ahora me conformo con que la gente lo sepa, que la gente tome conciencia de la importancia de estos derechos, pues no pido un favor, es solamente defender para que todos podamos convivir en armonía y transitar con la libertad que merecemos”.

Explicó que la libertad de usar un perro guía no quiere decir que solo pueda a entrar a sitios “pet friendly”, pues “no estamos exigiendo llevar a una mascota que se va a hacer del baño o se va subirse a las mesas. Es un perro totalmente entrenado, ya que puedo levantarme al baño del brazo de otra persona y el perro no se moverá a menos que yo le dé la indicación; se queda quieta y sin molestar a nadie”.

Estos animales tienen en la correa un anuncio que dice “No me toquen, estoy trabajando” | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa

¿Por qué no se debe tocar al perro guía mientras trabaja?

“Sadie” es una perra guía que tiene seis años y 4 meses. Como cualquier animal puede distraerse y socializar y si es acariciado puede perder la concentración y provocar que una persona ciega sufra un accidente, por ello estos animales tienen en la correa un anuncio que dice “No me toquen, estoy trabajando”.

“Cuando el perro se distrae a quién regañas; nosotros le damos un pequeño jalón y le decimos ‘no’; una corrección”, pero él es regañado injustificadamente porque la culpable es la persona que lo distrajo. Sí puede ser acariciado, claro, pero siempre y cuando no traiga su arnés, chaleco y correas”, dijo.

Además explicó el músico que el mango de la correa es el medio para comunicarse con “Sadie”, pues con el tacto siente cuando se gira a derecha o a izquierda; también si detiene porque hay un escalón o esquina.

Más que al gobierno que trabaja en rampas o accesos para personas ciegas o adultos mayores, Fernando Apan llamó a la sociedad a que no espere a que llegue una discapacidad a sus vidas para comprender las necesidades del sector: “Por favor no suban los carros a las banquetas porque no encuentra donde estacionarse o no se estacionen en doble fila”.

“Xalapa es demasiada estrecha, complicada y con muchas escaleras. Yo le digo a la gente ‘no me la ponga más complicada’, pues nosotros nos tenemos que bajar de la banqueta si hay un camión estacionado”, declaró.

Sobre el respaldo legal, en artículo 58 de la Ley Federal del Consumidor se menciona que el perro guía es herramienta de trabajo y no un lujo | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa

Para finalizar, consideró que no se necesitan más leyes, “solo necesitamos más amor, más comprensión; si nosotros no comprendemos nos volvemos gente discapacitada y no hay discapacidad más grande que la falta de empatía”.