El Laurel de la India que se intervino en la avenida Salvador Díaz Mirón contaba con un dictamen técnico de valoración que indicaba que estaba muerto, presentaba un alto riesgo de caída y un peligro para la población, de acuerdo con la directora de Medio Ambiente, Ana Isabel Guevara Escobar.
Explicó que de acuerdo con este dictamen, la especie tenía daños estructurales graves en copa, tronco y raíz, con alta probabilidad de caída y riesgo elevado de accidente, ante el inicio de la temporada de lluvias y huracanes.
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“Se trataba de un ejemplar de aproximadamente 16 metros de altura que de caer podría causar afectaciones serias a peatones, automovilistas o la infraestructura urbana. El árbol se encontraba sobre el camellón, sin presencia de follaje y sus ramas, que estaban secas, interferían la visibilidad de las luminarias”.
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Además se detectó presencia de plantas epífitas, desprendimiento de corteza grave y daños por insecto barrenador en el tronco, así como algunas grietas longitudinales. Aunado a ello, en las raíces y cuello radicular se ubicó la presencia de hongos, por lo que representaba un riesgo y era urgente su intervención, dijo.
La funcionaria municipal manifestó que ante esta situación se determinó actuar y no poner en peligro a la ciudadanía o automovilistas.
“En esta administración ningún árbol se ha intervenido sin contar con un dictamen técnico, todos los árboles que se han retirado es por el riesgo que representaban. Estamos en favor del medio ambiente, pero no podemos poner en peligro a la gente”, refirió.
