¿Violencia es democrática? No distingue si eres del PRI, PAN, católica o cristiana, dice feminista

Ninguna mujer podría alzar la mano y decir que no ha sido víctima de violencia, dijo Edurne Ochoa

Ariadna García | Diario de Xalapa

  · miércoles 7 de diciembre de 2022

A la violencia no le importan partidos, ideologías o territorios | Foto: Andrea Murcia/Cuartoscuro

Actualmente solo existe algo que es verdaderamente democrático y eso es la violencia, afirmó la consultora feminista Edurne Ochoa. Durante su conferencia "Calladita no me veo más bonita" en sala de cabildo del Palacio Municipal dijo que la violencia no discrimina si eres del PRI, PAN, PRD, Morena o cualquier otro partido político.

"No importa si eres católica, cristiana, pentecostés, agnóstica, si eres mujer rural, indígena, afromexicana, migrante o con discapacidad, nos va a tocar la violencia. Ninguna mujer podría no alzar la mano y decir que no ha sido víctima de violencia", dijo.

La experta remarcó que las violencias son muy democráticas y no distinguen de partidos, ideologías o territorios. Alertó que México ocupa lugares “terribles” en temas de violación sexual pues cada hora se van a presentar formalmente cuatro denuncias por violación sexual en este país e informalmente cuatro violaciones se cometen cada minuto de acuerdo con ONU mujeres.

“Imagínense todas las violaciones que durante este periodo van a suceder en este país. Es necesario resignificar la historia de las mujeres, lo que nos han dicho que tenemos que ser y visibilizar y llevar al espacio pública todas estas desigualdades, todo esto que nos atraviesa como mujeres de manera desproporcional”.

Y es que subrayó que no es lo mismo la violencia que sufren los varones a la que sufren las mujeres por el hecho de serlo.

“Esto nos hace ponernos todavía más a reflexionar qué es lo que tendríamos que hacer y por qué es tan importante esta política pública que sale, que dice, ‘no es no’ y hoy se ha vuelto un gran lema del movimiento feminista, de las defensoras de derechos humanos, pero tenemos que saber que cuando no nos callamos, cuando alzamos la voz, cuando lo primero que hacemos es ‘no quiero’, ‘no me siento a gusto’, ‘no me siento cómoda’, ‘no es no’ es para que las mujeres nos atrevamos a decir no”.

Agregó que a las mujeres se les ha enseñado a ser sumisas, complacer, “a que calladitas se ven más bonitas y que la voz pública que tienen no la deberían utilizar para incomodar o para no ser estas mujeres encantadoras, seductoras, que persuaden y demás a alguien que está con ellas porque cómo vamos a decir que no’, cómo nos vamos a negar a cualquier deseo’; ‘no es no’, es algo tan fácil, tiene dos letras, debería ser algo inmediatamente receptivo para que entendamos que hay una negación, barrera, un bloqueo; sin embargo en este país termina teniendo connotaciones de sí”.