Veracruz, Ver.- La iglesia católica de Veracruz coincide en que se debe reforzar la vigilancia en la carretera que conduce al municipio de Alvarado así como municipios aledaños como Medellín de Bravo y Jamapa debido a que suelen ser zonas recurrentes de hechos delictivos.
El Obispo de Veracruz, Carlos Briseño Arch, calificó esa zona como un corredor “turbio” tanto para los lugareños como para los automovilistas que transitan por esas zonas.
“Yo sí pediría de alguna manera que observáramos todo ese corredor, a mí se me ha hecho muy peligroso, sobre todo el que da a Alvarado, esa parte de ahí, de ver que da un movimiento turbio, como el mar está muy cerca de la tierra, esa parte de ahí, sí se me hace que se dan cosas medias raras y que el gobierno debería vigilar más”, considera.
En entrevista previa a la homilía que celebra cada mañana de domingo, el jerarca católico relató su experiencia registrada el pasado jueves, cuando se dio un intercambio de disparos entre elementos de seguridad pública del estado y un grupo delictivo en la comunidad de Paso del Toro.
“En la tarde, venía de Jamapa, iba a ir rumbo a El Dorado, por Boca del Río; nos encomendamos a Dios todos porque él es el dueño de la vida y el que nos protege, gracias a Dios no llegó a más, me avisaron y me desvíe”, comentó Briseño Arch.
Obispo mantendrá sus actividades
Pese a la experiencia vivida, el prelado no tiene la intención de cambiar el horario de sus actividades como representante de la Diócesis de Veracruz, además, que tampoco incrementará el número de personas que lo acompañan a realizar sus encomiendas eclesiásticas.
“No, de hecho ustedes saben que los hechos delictivos pueden ocurrir en cualquier hora y día. Lo que si trato cuando salgo fuera de la ciudad trato de ir acompañado por cualquier cosa, pero yo creo que es parte de lo que tenemos que hacer todos, no viajar ni andar solo”, comenta.