Obras de ayuntamientos destruyen sitios arqueológicos; ¿por qué no consultan al INAH?

Córdoba y Veracruz, entre las ciudades que tienen más casos registrados, dice director del MAX

Ariadna García/Diario de Xalapa

  · martes 13 de septiembre de 2022

Primero debe hacerse una inspección del INAH antes de hacer obras nuevas, dice Alfredo Delgado Calderón

En varios municipios del estado, entre ellos Xalapa, se hace obra pública sin avisar al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) afectando sitios arqueológicos, alertó el director del Museo de Antropología de Xalapa, Alfredo Delgado Calderón.

En entrevista dijo que por ley todas las autoridades municipales y estatales tienen que avisar a los centros INAH de sus estados para hacer una inspección previa y se determine la viabilidad de la obra o si afecta al patrimonio, pero en más del 50 por ciento de los casos no lo hace.

"En Córdoba, que está creciendo sobre una gran cantidad de sitios arqueológicos, es una de las que tiene esta problemática, otra es la ciudad de Veracruz que tiene alrededor de 200 sitios arqueológicos".

Expuso que en ocasiones las instituciones no se dan abasto, pero en otras las autoridades empiezan obras sin hacer los trámites sobre todo las municipales que hacen carreteras o introducen energía eléctrica y no avisan a las instancias correspondientes y afectan los sitios arqueológicos.

"Y obras particulares también. Por ejemplo, Xalapa está creciendo, tiene decenas de colonias y los arqueólogos a veces cuando llegan al sitio resulta que ya fue arrasado por la maquinaria; Coatepec es otro caso que Campo Viejo era un sitio grandísimo, se puso un perímetro de protección y sin embargo muchos particulares no lo respetan, esa es una problemática de todo el estado".

Agregó que, aunque las obras se pueden detener, no tiene caso que se proceda de esta forma considerando que se puede prevenir.

A veces cuando llegamos ya se destruyeron plazas y es una información que se pierde

Recordó que algunas de las se pudieron rescatar están en Acayucan cuando se construyó una unidad habitacional y la maquinaria estaba arrasando un sitio arqueológico, pero llegó el INAH, los detuvo, y los obligó a hacer un rescate.

“De cuatro plazas que había, destruyeron uno, el sitio afortunadamente se conservó, pero el caso contrario Jáltipan creció sobre el sitio arqueológico y lo que ellos llaman el Cerro de la Malinche que es el montículo principal, prácticamente está ahogado entre Palacio Municipal y el estacionamiento de Policía y otras obras alrededor. Sigue siendo un sitio simbólico muy importante, pero ya no se puede apreciar, ha habido afectaciones graves”.

Expuso que incluso es muy frecuente que en los montículos principales se pongan tanques de agua como es el caso de San Juan Evangelista donde estos sitios se ocuparon para hacer obras municipales.

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“Por ejemplo la industria extractiva, en el propio San Juan Evangelista en Acayucan que se extraen grava para la construcción muchas veces las graveras no hacen su trámite y destruyen sitios arqueológicos completos”.

En el caso de Xalapa, explicó que las obras de bacheo o de reparación de calles no afectan porque el sitio ya está alterado; sin embargo, el problema es cuando las colonias crecen sobre áreas que no han sido alteradas y donde se debe pedir la autorización de los centros INAH.