Tras meses de trabajo para limpiar la Laguna El Castillo, pescadores lamentan que desde el comité de vigilancia de ese cuerpo de agua les limiten su actividad. Señalan que supuestamente por cuestiones medioambientales no pueden utilizar una red, pero los integrantes de ese grupo si la ocupan para sacar más cantidad de mojarras.
Exponen que consideran que es un acto de abuso que la actual representación del Comité de la Laguna El Castillo los restrinja siendo que ellos ayudaron a quitar el lirio que afectaba a ese cuerpo de agua, pero más cuando ellos si utilizan redes grandes para sacar producto, “solo ellos pueden pescar con una red de gran dimensión, pero a nosotros no nos dejan, con la administración anterior no ocurrían este tipo de situaciones irregulares”, dice uno de ellos.
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¿Cuánto pagan para pescar en laguna?
Por esa situación, ahora solo quedan unos cinco pescadores independientes, porque ya no les deja lo que antes y por las formas. Comentan que ellos pagan al mencionado comité de vigilancia 100 pesos diariamente para poder pescar en alguno de los dos horarios que se tienen para realizar esta actividad; uno es temprano de 7 a 12 horas y de 13 a 18 horas.
En esta Laguna, explica Arturo Pérez Landero pescan mojarra que es lo único que hay. Desde hace un tiempo solo pueden utilizar una red pequeña que es atarraya, que se lanza a mano. “Nosotros estamos de acuerdo en que se proteja el medioambiente, pero el asunto es que nos los prohíben a nosotros, pero ellos si utilizan redes grandes para capturar más mojarras", denuncia.
A este espacio, comenta que llegan muchas familias a comprarles las mojarras directamente a los pescadores; el precio es de acuerdo al tamaño puede ser de 60 o 70 pesos el kilogramo. “Son unas 3 por kilogramo, así que por ello vienen a comprarnos a nosotros, son frescas y a muy buen costo”.
La gente llega porque es pescado fresco, del día y eso no lo puedes encontrar en las pescaderías
Este pescador comenta que en un buen día puede capturar hasta 20 kilogramos, durante las cinco horas que tiene derecho a pescar. Pero cuando le va mal solo atrapa 10 kilos que son vendidos a comerciantes o familias que llegan a buscar su producto; todo se vende, “porque de Xalapa viene mucha gente a comprarnos”.
¿Cómo es la vida de un pescador de El Castillo?
Él sale temprano en su barcaza a buscar pescar la mayor cantidad de mojarras que puede, después regresa a tierra para que uno de sus sobrinos recoja el producto y lo lleve a vender, mientras él intenta atrapar más, así que regresa al centro de la laguna con sus compañeros para un nuevo intento.
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Arturo Pérez explica que tiene unos seis años como pescador, es una actividad que disfruta, “muchos llegan a intentar ser pescadores, pero no les gusta se aburren porque hay que ser pacientes, soportar los cambios de clima y esperar a que caigan los peces”.
En su caso se distrae con el paisaje espectacular que tiene esta laguna, recuerda los tiempos malos cuando la laguna estaba contaminada y tenía algas y lirios que les impedían realizar su actividad, “pero nos organizamos los pescadores con el entonces comité de vigilancia para limpiarla y poder disfrutar el sitio que ahora es una zona natural y recreación de esta población”.
Este sitio es un sitio ecológico que posee una vasta riqueza de fauna y flora, es hogar de un sinfín de aves por lo que explica que se debe cuidar. Los pescadores realizan su labor respetando su entorno, solo piden que el tema sea parejo para todos.
Indica que a las familias de esta población les interesa mantener intacta su belleza, “porque los fines de semana llega infinidad de familias que realizan actividades turísticas y reactivan la economía de la zona, por eso queremos que se mantenga limpia y que se cuide, pero todos parejo”.