ATZACAN, Ver.- Más de 22 mil habitantes de este municipio están parcialmente incomunicados al registrarse un socavón en la carretera principal Orizaba-Atzacan a la altura de la colonia Revolución. El presidente municipal, Mario Vargas Amador dijo que se buscan estrategias para atender este problema.
Este hundimiento se dio a metros de distancia del que se registró el pasado 7 de septiembre y puso en riesgo a por lo menos 10 familias que viven cerca a esa zona.
Las lluvias que se registraron durante los últimos días reblandecieron tramos de la carretera, que colapsa poco a poco en diferentes tramos. El que se registró este día es de más de 15 metros de ancho y 5 de profundidad, por lo que se desplomó casi la mitad de la carpeta de rodamiento.
En entrevista, el alcalde dijo que se dan a la tarea de hacer un plan emergente, pues esa carretera es la principal vía de comunicación con Orizaba y por tanto la más transitada.
"Tenemos que hacer un plan emergente, primero tenemos que ver la vía de acceso a la cabecera, que no está en condiciones, es un camino por donde los productores sacan sus cosechas de caña en camiones”, dijo.
Agregó que la primera medida será habilitar una vía de comunicación alterna, emergente, que quede en buenas condiciones y sea transitable, para que la población pueda entrar y salir del municipio sin problemas.
Suspenden clases en preescolar y primaria
Cerca de ese lugar se ubica un preescolar y la Escuela Primaria Revolución a las que asisten alrededor de 70 estudiantes, a cuyos padres se les notificó la suspensión de clases al existir riesgo para los inmuebles.
Las autoridades calcularon que el socavón tiene unos 15 metros de ancho por casi cinco de profundidad, por lo que consideraron que los trabajos de reparación se llevarán semanas e incluso meses.
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El edil explicó que tres viviendas están en zona de riesgo debido a que el hundimiento podría extenderse hasta esos inmuebles, por lo que exhortó a las familias a desalojar sus viviendas y trasladarse al albergue que se habilitó en la cabecera municipal.
(Nota publicada originalmente en El Sol de Orizaba)