Veracruz, Ver.- Aunque el fin de semana hubo cielo nublado y precipitaciones parciales, los turistas no dejaron pasar la oportunidad de visitar las playas del Puerto de Veracruz. Víctor René Morales, restaurantero de la zona de Villa del Mar, aseguró que sus ventas fueron buenas.
“Esperaba un poquito más de venta, pero sí nos subió un 50 por ciento y estoy muy agradecido, esperemos mantenernos de aquí para adelante (…) el sábado que estuvo lloviendo gracias a Dios aquí estuvo lleno, tuvimos unas cuatro carpas semillenas y las sombrillas semillenas también”, comentó.
De acuerdo con el prestador de servicios turísticos, los meses fuertes para ellos son durante la temporada decembrina, así que se mantienen optimistas de tener un repunte aún mayor “si Dios quiere con uno muy bueno, es el mejor”, dijo.
Aunque el último día del puente largo los litorales veracruzanos lucieron mayormente vacíos, dicen que el sector restaurantero de la zona cerró con broche de oro.
Lancheros no tuvieron la demanda esperada
Juan Ceballos Aguilar, lanchero de la zona del acuario del Puerto de Veracruz, dijo que si bien ha habido algunos puentes, las condiciones climatológicas han impedido a los lancheros trabajar de forma normal.
Comentó que si bien otros sectores como el pesquero se ven afectados, no es en la misma medida que ellos debido a que deben velar por la seguridad y bienestar de las personas que transportan en sus embarcaciones.
“Es más delicado, llevamos personas, somos responsables de su seguridad, tanto llevarlos a nuestro recorrido, llevarlos y traerlos con bien, hay tanto más responsabilidad, la pesca también es afectada, pero es un poco menos ya que con vientos de 30-40 pueden llegar a salir”, mencionó.
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Añadió que ellos se rigen bajo las normas de capitanía del puerto y al haber cierres a la navegación, no pueden laborar continuamente y por ende tampoco llevar el sustento a sus hogares.
Debido a esta situación, señaló que hay quienes buscan trabajos en tierra ya sea ayudante de albañil o alguien tiene algún oficio, “se dispersa mucha gente y del 100 por ciento ya viene quedando un 20-30 por ciento de trabajadores de servicios turísticos”.
Finalmente, explicó que seguirán buscando alternativas para no tener pérdidas económicas durante la temporada baja, tiempo en que la afluencia de visitantes disminuye hasta un 70 por ciento.