Veracruz, Ver.- Sin la certeza de cómo sería la vida en una vecindad, Silvia González Noche llegó al patio “San Antonio” lugar que se convirtió en su hogar por 60 años y que en unos días recibirá las escrituras que la acreditan como su propiedad.
Mientras echa las tortillas para hacer las picadas, doña Silvia, como la llaman de cariño expresa que los habitantes de una vecindad se convierten en familia de manera inmediata, todos se conocen, se “echan la mano” en sus necesidades económicas, aunque también se pelean y dejan de hablarse por algunos días.
Recuerda que junto con su esposo llegó a esta vecindad ubicada sobre la calle de Doblado entre Xicoténcatl y 16 de Septiembre; la pequeña vivienda era un cuarto de cuatro por cuatro sin baño y sin lavadero propio, estos se encontraban justo en el centro del terreno y era compartido por todos los avecindados.
“Llegamos aquí sin conocer a nadie, había algunos que eran familia de mi esposo, pero yo no soy de problemas y me adapté rápido, había muchas familias y todos compartimos los sanitarios y había un área de lavaderos estaban alrededor del árbol, ahí cada quien tenía su bote donde guardaba su jabón, sus cosas”, menciona.
Familias llegaron y se fueron y ella se mantuvo, hasta la muerte de su esposo hace cinco, por lo que abandonó la propiedad y con sus ahorros por la venta de picadas compró una casa más grande en la misma zona, un poco más adentro de la vecindad pero con baño propio, lavadero y con un segundo piso.
“Ya me acostumbré a vivir aquí, la gente ya me conoce, quedamos pocas personas viviendo aquí, algunos ya somos familia, aquí vive mi hermano, una sobrina con su esposo que llegaron del rancho, estamos cerca, aunque justo ahora no me hablo con mi cuñada tuvimos diferencias”, expone.
Yaneth González migró a Veracruz hace unos días junto con su esposo y sus hijas en busca de trabajo y doña Silvia les consiguió un lugar en la vecindad para establecerse en lo que buscan algo mejor.
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Asegura sentirse contenta porque en Veracruz siempre hay más oportunidades de trabajo, así como servicio médico y empleo para ella y su esposo.
“Nos mudamos hace unos días, mi tía nos consiguió la casa que es de un familiar suyo, todos nos han recibido bien es como sentirse en el rancho, en familia. Mi tía está cerca para apoyarnos; venimos de Tenenexpan, municipio de Manlio Fabio Altamirano, pero con la ventaja de que aquí podremos encontrar trabajo que no hay en el rancho”, manifiesta.
¿Cuál es la vecindad más antigua de Veracruz?
De acuerdo con la profesora Nohemí Palomino, la vecindad más grande y más antigua es precisamente el llamado actualmente “Barrio de la Huaca” que llegó a tener 42 vecindades, donde gente de distintas partes del país, con tradiciones y culturas diferentes, otro tipo de piel y lenguaje llegaron a establecerse ahí para empezar una nueva vida.
Recuerda que el crecimiento de Veracruz hizo que personas de municipios como Cosamaloapan, Alvarado, Tlacotalpan y otros más llegaran a vivir a esta ciudad buscando una oportunidad de trabajo.
La mayoría de los que migraron a Veracruz venían con toda su familia por lo que rápidamente se acomodaron en las vecindades mientras trabajaban en el comercio o algún oficio.
“Toda esa gente fue llegando a Veracruz para buscar trabajo, en el comercio la mayoría y se acomodaron a vivir en los cuartitos de vecindad del Barrio de la Huaca es que la vecindad más grande y más antigua”, señala.
Los patios de vecindad fueron el modelo para la construcción de las primeras unidades habitacionales, ya que las casas también están pegadas unas de otra y comparten los patios para el esparcimiento familiar.
En su caso, el Barrio de la Huaca ha sido el hogar de su madre, de ella y ahora de su hijo, todos en diferentes casas, pero unidos por un inmenso patio conocido como el callejón Toña “La Negra” el cual ha sido el escenario de grandes momentos, desde pequeñas fiestas hasta festivales con la participación de turismo.