Los “productos milagro” o dietas extremas para bajar de peso de manera acelerada podrían ocasionar que quienes las utilicen terminen el año no solo pesando más de lo que comenzaron, sino también con daños renales, hepáticos, hormonales o anemias graves, alertó Armando Antonio Izarraráz, médico cirujano y especialista en el tratamiento integral de sobrepeso y obesidad.
En entrevista, el especialista señaló que el ejercicio extenuante tampoco es recomendado para aquellas personas que inician el año con kilos de más, ya que abusar de este podría ocasionar daños físicos en la columna, rodillas e incluso –en casos más extremos- daños cardíacos y hasta infartos. Por ello, advierte que la única manera de lograr un peso adecuado es la combinación de una dieta equilibrada, ejercicio y el descanso, ya que este último factor podría ser el que esté deteniendo la pérdida de peso en pacientes que comen bien y tienen actividad física correcta.
Certificado en el tratamiento integral de sobrepeso y obesidad, Antonio Izarraráz recibe diariamente en su consultorio a pacientes que acuden para recibir asesoría sobre la manera de comer saludable y mantener un peso ideal. Sin embargo, antes de llegar a él muchos de estos realizaron ya dietas incorrectas o tomaron productos de los llamados “milagros” para bajar y estos dejaron secuelas en su estado físico.
Lo que yo he visto aquí en consulta son muchísimos problemas secundarios a estos productos. He visto daño a nivel renal, a nivel hepático, anemias muy prolongadas y daño en glándulas, principalmente en la tiroides.
Este último efecto secundario, el del daño a la tiroides, podría ser uno de los más graves, alerta el médico, ya que esta glándula juega un papel fundamental en la regulación del metabolismo y al fallar provoca que sea sumamente difícil llegar a un peso ideal. Así, miles de personas podrían estar consumiendo productos –legales o ilegales- que le impedirán para siempre tener el peso ideal. “Incluso hay pastillas patentadas, que se venden y que pueden ser adquiridas hasta en Facebook, contienen una hormona tiroidea y lo que provoca es que se acelere el metabolismo y se baje de peso más rápido. El problema es que cuando dejas de tomarlos la glándula se cansa y deja de producir la hormona y podemos caer en un hipotiroidismo secundario, eso lo he encontrado mucho en los pacientes”, dice.
En entrevista, el médico advierte que, a pesar de los riesgos que conllevan estos productos estos se consiguen fácilmente e incluso, a lo largo de la ciudad se pueden observar decenas de “clubes de nutrición” que invitan a la gente a consumir malteadas, jugos o pastillas que “quitan el hambre” sin detallar los efectos secundarios que tiene en el organismo el consumirlos. Estos productos, asegura, van directamente al hipotálamo y trabajan para controlar la saciedad cuando lo ideal no es controlarlo sino dejarlo funcionar de manera correcta. “Es por eso el famoso rebote. Es muy común que personas que comienzan a tomar estos productos ahorita, por ahí de julio van a pesar mucho más que lo que pesaron en un inicio del año”, señala.
NADIE DEBE BAJAR 10 KILOS EN UN MES
Antonio Izarraráz explica que los especialistas médicos que dan consultas nutricionales tienen como base la Norma Oficial Mexicana para el Tratamiento Integral de la Obesidad y el Sobrepeso (NOM-008-SSA3) la cual señala que cada tratamiento debe ser individualizado y prohíbe la aplicación de dietas bases para todos los pacientes.
El especialista añade que esta norma indica además el número de kilos por mes que como máximo puede bajar un paciente. En este sentido, expuso que las dietas o productos que prometen bajar 10 o más kilos al mes están violando esta norma y por ende poniendo en serio riesgo la salud de quienes lo usen o apliquen. “Desgraciadamente hay muchas personas que se guían por la ley del mínimo esfuerzo y recurren a estos productos porque el seguir un régimen alimenticio requiere de esfuerzo y de ciertos sacrificios y no lo que queremos hacer”, dijo.
La aplicación de dietas que le funcionaron a un familiar, vecino o conocido es otro de los errores recurrentes de quienes quieren perder peso. Cuenta el especialista que, en su paso por el consultorio, los pacientes le han confesado seguir la dieta de la col, la dieta de la manzana o incluso, ayunos prolongados o la dieta detox que no están bien manejadas y ponen en riesgo su salud.
Lo que hacen es que el cuerpo se va a descompensar en sus requerimientos nutricios y al descompensarse va a comenzar a usar reservas como la grasa y van a bajar pero esta no es la forma ideal ya que comienzan a faltar nutrientes
Antonio Izarraráz hace hincapié en que toda dieta debe ser suficiente, balanceada, variada y completa al contener todos los nutrientes que se requiere por lo que comer exclusivamente un producto provoca que no se cumpla con los requerimientos. “Es muy peligroso que se recurra a estas dietas rápidas”.
EJERCICIO Y DESCANSO
Para Antonio Izarraráz el cuerpo humano no debe ser obligado a bajar de peso sino que se le debe dotar de las herramientas necesarias para recuperar la salud y que una vez logrado esto, el propio organismo bajará y se mantendrá en el peso ideal. “Al comer bien la persona el cuerpo ‘entiende’ que ya no necesita la reserva energética que tiene y se va a deshacer de ella y va a dejar de acumularla”, dice.
El médico cirujano añade que para lograr esto es fundamental conocer y controlar la alimentación y de acuerdo al requerimiento especifico darle lo que requiere al cuerpo. Para él, la clave para lograr un peso ideal es 60 por ciento de alimentación balanceada, mientras que el porcentaje restante se basa en ejercicio y actividad física (30 por ciento) y en el descanso correcto (10 por ciento).
Por ello, precisa que también es fundamental que se cuente con un asesor deportivo que prepare una rutina adecuada para cada persona pero sobre todo en la que se tomen en cuenta los factores del peso y la salud de quienes la realizan.