La Arquidiócesis de Xalapa rechaza la resolución jurisdiccional que pretende someter al Poder Legislativo de Veracruz porque cree que “la vida es un derecho humano fundamental que debe respetarse desde el momento de la concepción, como lo establece nuestra Constitución en su artículo 4º, a partir del cual tienen existencia todos los demás derechos”. En el comunicado de este domingo, la iglesia católica exhorta a los diputados para que sigan defendiendo la vida humana en sus diferentes etapas.
Que defiendan la soberanía del Poder Legislativo y no se dejen intimidar por presiones externas o compromisos con grupos minoritarios. La mayoría de los veracruzanos aman y respetan la vida. El documento firmado por José Manuel Suazo Reyes, director de la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Xalapa, manifiesta que querer legalizar el aborto es querer hacer legal el asesinato de un ser humano y que esto es un terrible acto criminal e indebido.
“La vida del concebido, no nacido es un bien jurídico que el Estado debe proteger, ya que se trata de un ser humano; por tanto, sujeto de derechos. Hacer legal el aborto en Veracruz es aumentar el número de homicidios en nuestro estado y alentar que se siga derramando sangre inocente”, se lee en el documento. Afirma que es inaceptable e inconcebible que se pretenda poner de rodillas al Poder Legislativo de un Estado que se ha pronunciado por la protección de la vida y de los derechos del ser humano, valiéndose de la orden de un juez federal; en todo lo cual se observa inmediatamente un deseo de imposición y de extralimitación de funciones, pretendiendo que ahora los jueces sean quienes decidan los términos en que se ha de legislar.
“Lo que se percibe inmediatamente es que quienes han buscado y promueven esta desproporcionada resolución jurisdiccional, en realidad están promoviendo más violencia en Veracruz, pues con la reforma al Código Penal que pretenden se permitiría asesinar a los niños durante los tres primeros meses de existencia.
Esta decisión judicial nos parece cruel e inhumana porque promueve que en Veracruz se siga derramando más sangre, y más grave aún, porque se trata de sangre inocente, la sangre de seres humanos que no se pueden defender”, dice el comunicado. La Arquidiócesis de Xalapa consideramos que se contraviene la voluntad popular puesto que la mayoría de los veracruzanos aman y consideran la vida como un valor supremo y que así lo han demostrado cuando en 2016 se reformó el artículo cuarto constitucional.
“La reforma –recuerda-- se llevó a cabo porque la gran mayoría de los veracruzanos ama y respeta la vida, ya que en sus inicios surgió como una iniciativa del pueblo ante los diputados, que son quienes lo representan, no ante los órganos jurisdiccionales que ni si quiera elegimos democráticamente”.
Lamenta la iglesia católica que el Congreso del Estado reciba presiones externas que provienen de las observaciones de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres o de las recomendaciones de funcionarios que carecen de facultades expresas en la Organización de las Naciones Unidas para hacer este tipo de exigencias y que por ello no se debe permitir esa intromisión.
“Aplaudimos la decisión del presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, de impugnar tal resolución por considerar que ‘no existió omisión legislativa y por ser un tema de estricta legalidad’, todo lo cual se llevó a cabo en el ejercicio soberano de las facultades que la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado les confiere a sus integrantes. En efecto, el Congreso de Veracruz ese asunto ya lo trató, y resolvió improcedente la reforma del Código Penal en sus artículos 149, 150 y 154. No se necesita ser un experto en leyes para comprender que una ley no puede estar por encima de la Constitución del Estado. Ninguna persona, grupo o partido político puede estar por encima de la Constitución”, afirma la Arquidiócesis de Xalapa.