El estado de Veracruz se ha consolidado como una de las entidades con mayor número de reportes de trata de personas en México, según el Reporte Anual 2023-2024 “Un Modelo Único contra la Trata”, elaborado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
Durante el período comprendido entre enero de 2023 y junio de 2024, Veracruz registró 130 casos, posicionándose solo por detrás de la Ciudad de México (722), el Estado de México (339) y Jalisco (146).
Modalidades más comunes de la trata de personas en Veracruz
El informe detalla que la prostitución ajena y otras formas de explotación sexual, así como la explotación laboral, son las modalidades de trata más comunes en Veracruz. Estas prácticas se han identificado en diversas regiones del estado, con una notable prevalencia en áreas con alta movilidad migratoria.
A nivel nacional, mediante la Línea y Chat Nacional Contra la Trata de Personas, se recibieron 2,445 reportes de trata de personas provenientes de las 32 entidades federativas. La mitad de estos casos se concentra en la Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Veracruz, Puebla y Nuevo León.
El reporte también subraya la conexión entre las redes de trata de personas y aquellas dedicadas al tráfico de migrantes. Estas organizaciones captan víctimas, principalmente mujeres, bajo la promesa de empleo, para luego forzarlas a trabajos forzados y otras actividades delictivas, como el secuestro y la extorsión.
En Veracruz, esta problemática se agrava debido a su ubicación estratégica como punto de tránsito migratorio, lo que facilita la operación de estas redes criminales.
Además, el estado es parte de una de las principales rutas de trabajo forzado que abarca desde el Golfo de México hasta Estados Unidos, pasando por otros estados como Nuevo León y Tamaulipas.
Impacto en la población vulnerable
Las víctimas de trata en México son en su mayoría mujeres y menores de edad, con un grupo particularmente vulnerable entre los 13 y 17 años. Según el reporte, el 48.8 por ciento de las víctimas son mujeres y menores, lo que refleja la gravedad del problema en términos de género y edad.
El informe también destaca un aumento en los casos de trata donde los perpetradores son familiares cercanos de las víctimas. Este tipo de casos ha crecido del 5.8 por ciento en el periodo 2019-2020 al 21 por ciento en 2023-2024, lo que indica un incremento significativo de 16 puntos porcentuales.
Estos lazos familiares son utilizados por los tratantes para manipular y controlar a las víctimas, aprovechando la confianza y/o dependencia económica.
Regiones y modalidades de explotación
Veracruz es parte de varias zonas de concentración de la trata de personas en México, especialmente en la región sur del país, que incluye también a Quintana Roo, Yucatán, Chiapas y Oaxaca. Las principales modalidades de explotación en estas regiones incluyen la prostitución ajena y otras formas de explotación sexual, así como el trabajo forzado y la mendicidad.
La Ciudad de México sigue siendo la entidad con mayor número de reportes, en parte debido a su papel como centro de operación de un modelo único contra la trata. Le sigue el Estado de México, donde los casos se concentran en municipios como Ecatepec, Chimalhuacán, Tlalnepantla, Nezahualcóyotl y Tultitlán.
A nivel nacional, durante el primer semestre de 2024 se abrieron 305 carpetas por trata, mientras que en el mismo periodo de 2022 se abrieron 414. Es decir, disminuyeron 24.5 por ciento.
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¿Qué consecuencias tiene la trata de personas?
El delito de trata de personas, en sus diversas formas, representa una grave violación a la dignidad humana y al libre desarrollo de la personalidad, afectando principalmente a mujeres, niñas, niños y adolescentes. Su vulnerabilidad los convierte en objetivos fáciles para la explotación sexual, prostitución, pornografía, turismo sexual, mendicidad, explotación laboral y adopciones ilegales con fines delictivos.
El Consejo Ciudadano ha sido fundamental en la operación de la Línea y Chat Nacional Contra la Trata de Personas, un recurso clave para la denuncia y asistencia a víctimas en México.
Esta iniciativa, apoyada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) a través de la campaña Corazón Azul, ofrece un apoyo esencial a quienes enfrentan situaciones de explotación y abuso.
