Xalapa, Ver.- El río Sedeño continúa siendo el basurero y drenaje de cientos de personas que se asientan en las zonas federales que colindan con el río en los municipios de Xalapa y Banderilla, aseguró Margarita Cruces, voluntaria y activista del parque lineal Quetzalapan-Sedeño.

En entrevista expuso que aunque se han reunido con las familias que habitan cerca del cauce, con el fin de solicitarles que dejen de contaminar el río, éstas no han atendido el llamado y siguen tirando basura o descargando sus tomas de drenaje ahí.

“Mucha gente avienta su basura y desechos a nuestro río, o quienes de manera directa descargan orina y desechos ahí (...) Ellos tienen que hacer conciencia de que es un río, no un basurero, y que es de todos, pero eso depende de cada persona”, expuso.

Precisó que aunque la contaminación de este afluente de agua ha disminuido considerablemente con la planta de tratamiento de aguas residuales, ahora el principal problema es la basura y desechos orgánicos que arroja la ciudadanía.

La voluntaria de la agrupación que protege el Área Natural Protegida (ANP) estatal de 13 hectáreas, a lo largo de 5.5 kilómetros, dio a conocer que hace dos semanas se llevó a cabo la última jornada de limpieza del año y en la que fueron colectadas más 20 lonas de basura y descubrieron objetos como colchones, llantas, colchonetas, televisiones, platos, ropa y zapatos que la gente tira al río, “creyendo que es un basurero”.

Margarita Cruces dio a conocer que la deforestación de los terrenos adyacentes al Sedeño es otra de las cosas que preocupa a la asociación civil Desarrollo Sustentable del Río Sedeño Lucas Martín, que se ha dedicado al saneamiento del río. Y es que, dijo, aún se está ejecutando un proyecto de urbanización en la zona de Xalapa que está derribando árboles y erosionando el suelo. “Es un permiso que dio la pasada administración del otro presidente —Américo Zúñiga Martínez— y que está provocando daños serios a la zona en cuestión de tala de árboles”, indicó.

Precisó que la respuesta ante este fenómeno ha sido reforestar otras áreas del río Sedeño, con la finalidad de que los deslaves no tengan tanto impacto negativo.