Córdoba, Ver.- Por su ubicación geográfica, el estado de Veracruz se ha convertido en el paso obligado para migrantes que van hacia Estados Unidos, pero también es el más peligroso para esta travesía, reconoce Norma Romero Vázquez, coordinadora del grupo de apoyo a migrantes Las Patronas.
Incluso señala que, a pesar de los diversos operativos que el Gobierno de México ha implementado para tratar de frenar la migración a bordo del tren denominado La Bestia, que es el que atraviesa México de sur a norte, los migrantes continúan internándose en México en busca de llegar a Estados Unidos o a los estados del norte de México para buscar trabajo.
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¿Qué opina la coordinadora de Las Patronas?
En entrevista Romero Vázquez destaca que en los últimos meses el flujo de migrantes se ha incrementado de manera considerable, pues precisa qué hay ocasiones en las que llegan a ver grupos de entre 150 a 200 migrantes viajando a bordo del tren, aunque aclara que la cifra es fluctuante.
La coordinadora de Las Patronas, explica que durante los años de pandemia el flujo de migrantes a bordo del tren se redujo de manera considerable, sin embargo, en los últimos meses La Bestia se ha convertido nuevamente en el medio de transporte más utilizado por migrantes, sin importar el riesgo que esto representa, pues lo único que buscan es llegar hacia el norte.
“El detalle es que muchos de los migrantes ya no tienen opciones (para recorrer el país) porque lamentablemente nadie les da trabajo, no hay forma de conseguir dinero y la opción es el tren y lo poco que pueden trabajar y rescatar ya es para llevarlo para poder pagarle a quienes resguardan los trenes”, explica.
Albergue es un lugar para escucharlos: Norma Romero
En relación a los albergues de apoyo a migrantes que existen en la ruta, Norma Romero Vázquez, reconoce que todos tienen diferentes formas de trabajar, por ejemplo, Las Patronas es un espacio donde los migrantes pueden, además de alimentarse e hidratarse, permanecer por varios días en lo que recobran fuerzas para continuar su travesía.
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Sin embargo, hay otros donde solo se les permite permanecer determinadas horas y con algunas restricciones, lo que hace que muchos migrantes busquen llegar al albergue de Las Patronas para poder descansar antes de continuar su viaje, ya sea a bordo del tren o caminando por las diferentes carreteras del estado.
“Todos los albergues están trabajando de diferente forma, pero nosotros estamos haciéndolo de una forma más consciente, más humana, pero sobre todo sentarnos con ellos, hablar con ellos, escucharlos, porque a veces también necesitan ser escuchados”, explica Romero Vázquez.
Expone que la migración no se va a detener mientras los gobiernos no hagan nada en sus países, incluso reconoce que cada vez son más los países los que están provocando que sus conciudadanos salgan en busca de una mejor calidad de vida para sus familias.
Pues recuerda que hasta hace cinco años los principales países de origen eran los de Centroamérica, sin embargo, ahora han atendido ciudadanos de Perú, Cuba, Haití, Colombia y Venezuela, lo que es preocupante porque demuestra que lejos de reducirse, la migración está extendiéndose hacia otros países.
Reconoce que muchos de los migrantes que han atendido en el albergue de Las Patronas les han platicado sobre sus experiencias en su paso por México, muchas veces llenas de extorsiones, violaciones a sus derechos humanos, persecución policial y hasta tráfico por parte de personas que prometen llevarlos a Estados Unidos a cambio de determinada cantidad de dinero.
¿Cuántos migrantes sufren delitos en su viaje?
En ese sentido, el activista integrante del Movimiento Migrante Centroamericano, Rubén Figueroa asegura que datos del 2022 arrojaron que seis de cada 10 migrantes fueron víctimas de algún delito. El más común, el tráfico de personas al ser un negocio que deja ganancias de entre 10 mil y 12 mil dólares por persona transportada a bordo de tráileres en condiciones poco aptas.
Práctica realizada, en la mayoría de las ocasiones, con el consentimiento de autoridades migratorias que permiten el tránsito de unidades de carga sin una revisión previa y muchas veces detectados una vez que el operador de la unidad los deja abandonados en alguna carretera del país.
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Tanto Norma Romero, como Rubén Figueroa han coincidido, en más de una ocasión, en que Veracruz es el estado más peligroso para los migrantes, pero lamentablemente también el paso obligado para la mayoría de ellos.
Al respecto, la delegación regional de la Comisión Estatal de Derechos Humanos informa que cada que se realiza alguna intervención de migrantes se hace un acompañamiento para garantizar el respeto a sus derechos humanos en todo momento.
Incluso, el titular de dicha delegación, Manuel Antonio Sánchez Hernández, explica que en caso de que los migrantes tengan alguna queja o consideren que sus derechos humanos han sido vulnerados, en ese momento se hace todo un protocolo para su salvaguarda.
Aunque señala que debido a que las políticas migratorias de México han variado, cada vez son menos los ciudadanos con situación irregular en nuestro país los que buscan un acercamiento con derechos humanos, además de que el seguimiento es complicado al ser personas que están en tránsito y es difícil poder dar continuidad a procesos administrativos.
Ruta del Golfo, ¿por qué es la más peligrosa?
Según el informe Rutas Estudios Sobre la Movilidad y Migración Internacional, de la Unidad Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), México está dividido en cuatro rutas migratorias: Golfo de México, Pacífico - Sur, Centro - Pacífico y Pacifico - Norte, sin embargo, es la Golfo de México, que abarca los estados de Chiapas, Tabasco, Veracruz y Tamaulipas la que más utilizan los migrantes.
Dicha ruta es también considerada de las más peligrosas para quienes ingresan de manera irregular a nuestro país provenientes de Honduras, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Colombia, Perú, Venezuela, pues muchos son víctimas de robos, asaltos y extorsión por parte de grupos delincuenciales que operan en estos estados.
De acuerdo a migrantes, la Ruta Golfo de México inicia en Tapachula, Chiapas, para dirigirse hacia Tenosique, Tabasco, y de ahí ingresan a Veracruz por el municipio de Coatzacoalcos, para dirigirse a Medias Aguas y trasladarse hacia la región centro, especialmente en la comunidad La Patrona, perteneciente al municipio de Amatlán.
En este punto, la mayoría de los migrantes hace una pausa en su recorrido para poder descansar, asearse un poco, comer y descansar para retomar su camino hacia la Ciudad de México, para trasladarse a Guadalajara y continuar hacia Irapuato, Guanajuato y encaminarse hacia Torreón, Coahuila, para de ahí encaminarse hacia Matamoros y Nuevo Laredo, Tamaulipas.
