La maestra Jessica Cadenas aplica desde hace tres años la activación neuronal en la enseñanza de español y matemáticas, de manera que sus alumnos aprenden a través del juego y lo hacen con gusto, ya que a la vez se divierten y refuerzan su autoestima.
Licenciada en Educación Especial por la Escuela Normal Veracruzana, Jessica realizó la tesis “Habilidades del pensamiento y el juego”, ya que siempre le ha gustado el juego e investigó cómo hacerlo parte de sus clases para que los niños no se aburran con las enseñanzas de materias que llegan a ser aburridas, tediosas e incluso indeseables.
Cuando les pone a repetir las tablas de multiplicar los niños inmediatamente se ponen a la defensiva, de ahí que ideara movimientos de coordinación que deben hacer mientras las repiten para aprendérselas, eso ha hecho que esto sea divertido, entretenido y sobre todo que entiendan que pueden hacerlo. Con todo esto los niños se motivan, se dan cuenta que sí pueden hacerlo, que no es tan difícil como creían y eso refuerza su autoestima.
Desde hace cuatro años, Jessica Cadenas, quien trabajó en varias instituciones tanto en esta ciudad como en Isla Mujeres, inició su proyecto “Juega, aprende y Confía en tu Inteligencia (JACI), donde atiende a niños desde los cuatro años hasta los de secundaria y con Transtornos de Déficit de Atención Asociado a Hiperactividad, con los que ha tenido resultados muy significativos, pues los hace trabajar con ambos hemisferios del cerebro para que se den cuenta de todas sus capacidades.
Añade que con los chicos más grandes trabaja también la parte emocional, ya que como es la edad en la que están entrando a otra etapa muchas veces no saben lo que está pasando en su interior y trata de darles una dirección.
Los niños pequeños, agrega, aprenden a leer jugando y asimismo aprenden matemáticas, ya que muchos han tenido malas experiencias, pero al poner en juego ambos hemisferios observan que es mucho más divertido y entonces quieren aprender más.