Xalapa, Ver.- La Arquidiócesis de Xalapa señaló que se viven tiempos difíciles que han llevado a cada individuo a pensar en lo más valioso que tiene una persona y el valor sagrado de la vida humana.
En el comunicado dominical emitido por el vocero de la Arquidiócesis, José Manuel Suazo Reyes, se indica que la contingencia por Covid-19 ha permitido reconocer que nuestra vida es muy frágil y que somos corresponsables unos de otros.
"También nos damos cuenta de que nos necesitamos y de que no podemos vivir aislados; en estos días de la llegada de este virus, estamos reconociendo el valor de la familia; la familia es el lugar más seguro a donde acudir y refugiarse", expuso el sacerdote.
Además, reiteró que la celebración de la Semana Santa no se detendrá, sino que se realizará de forma especial.
Ello porque los sacerdotes celebrarán los oficios estrictamente litúrgicos, sin presencia de fieles laicos y con ritos breves.
Los feligreses, por su parte, se unirán espiritualmente desde sus hogares a través de los medios de comunicación, la TV, la radio y por medio de las plataformas digitales disponibles.
Agradeció al gobierno del Estado de Veracruz que los oficios de esta Semana Santa, presididos por monseñor Hipólito Reyes Larios, serán transmitidos a través de Radio Televisión de Veracruz desde la catedral de Xalapa.
RTV transmitirá además las misas dominicales que restan de este mes de abril y la Arquidiócesis de Xalapa seguirá transmitiendo a través de sus diversas plataformas digitales.
Recordó que con la semana santa se abre con el Domingo de Ramos. Esta celebración conmemora por una parte la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén y por otra, nos relata la pasión Jesús.
Otro momento litúrgico de la semana santa es la celebración del Triduo Pascual, con el que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesús
El Triduo Pascual comienza el jueves santo con la misa de la cena del Señor. Este momento recuerda la institución de la Sagrada Eucaristía y del Orden Sagrado. El jueves santo es una ocasión para meditar en el servicio a los demás, como expresión de amor.
El viernes santo, recordamos la muerte de Jesús. En este día la Iglesia no celebra el Sacrificio eucarístico, sólo distribuye la sagrada comunión.
La celebración litúrgica se le conoce como la celebración de la pasión del Señor que tiene tres grandes momentos a saber: la liturgia de la palabra, la veneración de la cruz y la sagrada comunión.
El sábado santo celebramos la vigilia pascual, es la celebración con la que se culmina la pascua. La vigilia pascual es la vigilia más importante del año
litúrgico porque en ella celebramos la resurrección de Jesús, el misterio
central de nuestra fe. La vigilia pascual contiene también varios momentos importantes, estos son: el lucernario, la liturgia de la Palabra, la liturgia
bautismal y la liturgia eucarística.