ALTO LUCERO, Ver.- La sequía que persiste desde hace casi un año en la región costera de este municipio ha dañado el patrimonio de campesinos y ganaderos que por la falta de lluvias registran pérdidas calculadas en hasta 200 mil pesos.
El estiaje en la zona es tal que balsas, ríos, arroyos y lagunas lucen completamente secas, lo que daña principalmente al ganado.
Los campesinos decidieron detener las siembras, ya que el campo no recibió el agua de lluvia que requería y se carece del vital líquido para el riego de los cultivos.
Los ganaderos ven cómo sus reses, en edad inicial y adulta, pierden la batalla contra la falta de pastos y agua. Algunos animales enferman, otros simplemente mueren por deshidratación o falta de alimento.
Dicha circunstancia se refleja en las comunidades de Palma Sola, Vainillas, Potrero Alto, La Angostura, Colorado, Topilito, Piedra Blanca, Juan Hernández, Tecuan, Los Atlixcos, El Pedregal, Vaquería, entre otras.
PÉRDIDAS CONSIDERABLES
Dada la situación en la que se encuentra el campo algunos ganaderos han perdido desde una hasta 25 reses, según lo declarado a Diario de Xalapa.
En las peores circunstancias, como es el caso de Feliciano González, la pérdida económica fue de alrededor de 200 mil pesos. Ello porque 25 reses fallecieron a consecuencia de la sequía y cada una, dadas las circunstancias actuales, en el mercado se adquiere en un promedio de 8 mil pesos.
Sin embargo, cuando el ganado se encuentra en condiciones de venta para que su carne sea aprovechada puede llegar a tener un costo de entre 13 y 16 mil pesos en edad adulta, y en el caso de que se trate de vacas que serán utilizadas para cría, éstas son comercializadas hasta en 25 mil pesos.
El ganadero explicó que la situación se registró por la falta de agua en su terreno, aunado a que no hay pastos que permitan la alimentación del ganado.
En el caso de Julio Hernández Aguilar su pérdida económica fue de 100 mil pesos, ya que cinco reses, cada una con un costo aproximado de 20 mil pesos, murieron por desnutrición.
"Estas vacas iban a ser utilizadas para reproducirlas, pero no hubo manera de salvarlas y se murieron, la situación es crítica, sobre todo cuando se consideran los gastos que se deben tener para poder alimentar y darle de beber al ganado", expresó
Los ganaderos pasan por un momento crítico, ya que para mantener de pie a sus animales deben comprar alimentos, forraje, cáscaras de naranja o bien rentar pastos en terrenos foráneos.
Según el tipo de alimento que se le quiera dar a los animales y el número de éstos, será el gasto que cada ganadero tenga. A cada vaca se le dan como mínimo 5 kilogramos de alimento y el bulto, con 25 kilogramos, va de los 180 a 280 pesos.
Las pacas de forraje tienen un costo de entre 75 y 280 pesos, según el tipo de alimento del que se trate.
En tanto, la renta de los pastos que se paga cada mes genera un gasto de 200 pesos por animal y 300 cuando se trata de una vaca con cría. Al pago de los pastos se deben sumar los gastos extra que implica viajar diariamente o contratar a un peón para que acuda a vigilarlas. En este último caso el pago por persona que colabore con las actividades es de 250 diarios.
AGUA, OTRO PROBLEMA
La falta de agua en balsas, ríos, lagunas y demás afluentes se suma a la problemática por la carencia de alimento, pues se deben pagar "viajes" para poder llevar el vital líquido a los animales.
Cada viaje, de entre mil y mil 500 litros de agua, tiene un costo promedio de 200 pesos. Algunos ganaderos sólo pagan un servicio diario de este tipo, otros lo hacen incluso tres veces por día, conforme a las necesidades que tengan.
Así, por un servicio diario se pagan a la semana mil 400 pesos, pero en los casos en los que el gasto cotidiano es de hasta 600 pesos el monto por los siete días es de 4 mil 200 pesos.
Es importante aclarar que el servicio tiene tal costo porque el agua es extraída de pozos o de los pocos afluentes que han sobrevivido a esta temporada de sequía que, según los pobladores, no se había registrado desde hace más de dos décadas.