Sin notario venden exobreros de fábrica San Lorenzo; ¿sabes en cuántos millones?

Obreros están inconformes con trato pero están pasando por una fuerte crisis económica

Mayra Figueiras | El Sol de Orizaba

  · lunes 9 de mayo de 2022

Fábrica textil San Lorenzo se inauguró en 1882 | Foto: Miguel Castillo |

Nogales, Ver.- Una inmobiliaria de Puebla ofreció 115 millones de pesos por 17 hectáreas de la exfábrica textil “San Lorenzo, a los 250 copropietarios y 200 viudas, quienes empezaron a firmar en la Laguna de Nogales, para iniciar la compra-venta de la propiedad, que se encuentra en ruinas y abandonada.

Norberto Rivas Velázquez, viejo extextilero, platicó que el edificio, donde hace tres décadas funcionó la empresa textil más importante del municipio, hoy está en ruinas.

Recuerda que aún viven 250 viejos textileros y 200 viudas, que ya firman un documento con los apoderados de la inmobiliaria que ofreció adquirir las 17 hectáreas, que incluyen el campo deportivo, el canal de la Carbonero y la exfábrica.

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Afirmó que no están a gusto con la forma de negociar de los empleados de la inmobiliaria, quienes quieren pagar en cinco mensualidades y firman en una hoja, sin la presencia de notario público.

“Existe inconformidad de los compañeros, pero por la necesidad económica, ya están firmando y aceptando. Hay desconfianza e incertidumbre”, abundó.


Agregó que, de los 115 millones, los de la inmobiliaria quieren hacer un descuento del 5% para los corredores y un 3%, para el pago de impuestos y predial.

Para saber

La primera textilera que se instaló fue Cocolapan, en Orizaba, en el año 1836; luego la de “San Lorenzo”, en el año 1882.

Su construcción la realizó el inversionista Tomás Braniff, empresario norteamericano de origen irlandés, quien después de la fiebre del Oro de la década de 1850 y emplearse en la construcción de ferrocarriles en Perú y Chile, llegó a México para trabajar en el tendido de la línea entre México y Veracruz. Siendo gerente del Ferrocarril Mexicano, en 1873, visualizó la oportunidad de invertir en la industria y estableció la fábrica a un costado de la vía férrea, en el pueblo de Nogales, donde ya había una estación.

En el año 1990 estalló la huelga que dio inicio a la decadencia y quiebra de la fábrica. Más adelante, 451 extrabajadores lograron ser copropietarios y se adjudicaron el inmueble y otras propiedades.

Para el 2005 lograron vender las dos hidroeléctricas, los exobreros, viudas e hijos, quienes obtuvieron un pequeño beneficio, luego de años de lucha.