Con el conocimiento de que hay personas sordas de Xalapa, Veracruz, Coatzacoalcos, Orizaba y Córdoba que han podido cursar una carrera profesional; el que hay recuadro con intérprete en conferencias de la Secretaría de Salud del Estado, así como aspirantes sordos a ingresar a la Universidad Veracruzana, el 10 de junio Laura Edith Herrera y Aleisha Collins se unieron a la celebración del Día de la Lengua de Señas Mexicana.
Las coordinadoras del programa Casa Sorda coincidieron en declarar que este festejo es muy positivo porque sirve para promover y difundir que la LSM no es un lenguaje o un manual, sino una lengua que, igual que el español, tiene regionalismos de norte a sur del país y hasta préstamos lingüísticos de la Lengua de Signos Americana —Estados Unidos—.
Laura Edith Herrera expuso que en la entidad la mayoría de las personas sordas tiene barreras para aprender en su lengua materna —LSM—, algo que no debe dejar de señalarse para reducir el rezago educativo que se da al interior de esta comunidad.
Desde Casa Sorda, programa institucional de la Secretaría de Educación de Veracruz, que funciona en Xalapa, las dos gestoras realizan actividades de registro, difusión y acompañamiento. Aleisha Collins capacita a oyentes para que conozcan y aprendan la LSM. También brinda apoyo a algunas comunidades de manera presencial, con el objetivo de que los padres de familia puedan convivir con sus hijos y empleen la LSM.
Desde hace nueve meses en Casa Sorda estudian seis personas de distintas edades, incluida Laura Edith Herrera, quienes decidieron presentar examen del Ceneval.
“En el puerto de Veracruz hay varios aspirantes a estudiar una carrera en la UV; en Xalapa somos seis. Trabajamos de manera virtual cuatro áreas: Pensamiento lógico, Pensamiento matemático, Estructura de la lengua y Comprensión lectora”, dijo Laura Edith, quien en febrero pasado sentó un precedente al ser la primera mujer sorda en ofrecer una rueda de prensa en Veracruz.
En esta fecha especial, de manera virtual, lanzó la convocatoria abierta a escuelas interesadas en tener un mural artístico en uno de sus muros. Explicó que éste tendrá como discurso principal la LSM. También dio a conocer que uno de los jardines de niños ubicado en la avenida Rébsamen tendrá su mural, el cual ya está diseñado y será pintado por artistas sordos.
Los interesados pueden establecer comunicación mediante mensaje en Facebook, Instagram y Twitter de Casa Sorda Sev, o al correo casasorda.daa@msev.gob.mx
SÓLIDA VOCACIÓN DE SERVICIO
Aleisha Collins Arellano es la primera veracruzana oyente certificada en Lengua de Señas Mexicana (LSM). Desde finales de mayo se encarga de ser la intérprete del mensaje que emite la Secretaría de Salud del Estado para brindar información por el Covid-19. Hacer esta labor, declaró en entrevista, “es un honor, pero también una gran responsabilidad”.
La licenciada en Educación Especial acepta ser una persona muy feliz con su trabajo. Sin embargo, lamenta que en el país el número de intérpretes sea tan reducido.
De acuerdo con Abraham Manríquez, director del Instituto Mexicano de Lengua de Señas AC, hay menos 80 personas certificadas en LSM para la comunidad sorda, la cual aumenta en forma progresiva su participación dentro de la sociedad, en todos los ámbitos.
En el caso de la docente, quien radica en Xalapa pero es originaria del puerto de Veracruz, hay una sólida vocación de servicio, misma que le lleva a trabajar desde distintas áreas a favor de los sordos; una de ellas es la capacitación que ofrece a oyentes, actividad que forma parte del programa Casa Sorda, el cual coordina de manera conjunta con Laura Edith Herrera.
En el marco del Día de la Lengua de Señas Mexicana, que se conmemora el 10 de junio desde 2005, hizo un exhorto a la sociedad para que vea como una buena opción el aprender este sistema de signos lingüísticos, una manera de apoyar la inclusión de la comunidad sorda.
Por otra parte, Aleisha Collins celebró que aunque no están certificadas, en Veracruz sí hay ya varias personas con un buen nivel como intérpretes. En su caso, fue apenas en noviembre de 2019 cuando obtuvo el documento que la acredita como profesional.
Compartió que no fue sencillo y le dedicó mucho tiempo; su estudio y preparación iniciaron desde 2014.
Por ser maestra de educación especial empecé con clases de nivel básico en una asociación, después me involucré con una comunidad sorda, me hice de amigos, iba a sus reuniones, los acompañaba…
Rememoró que después se mudó a la Ciudad de México, donde durante dos años aprendió de otros intérpretes que tenían mucha experiencia; para 2018 regresó a Xalapa y se encontró con que había nuevas iniciativas y la convocaron para trabajar en el programa Casa Sorda de la Secretaría de Educación de Veracruz. Fue hasta noviembre de 2019 que se certificó, en Querétaro.
La maestra de 31 años acepta estar muy orgullosa de lo que ha logrado, pero aclara que más allá de las satisfacciones personales está el apoyo a una comunidad que por muchos años ha estado invisibilizada.
De su trabajo para Comunicación Social del Estado de Veracruz calificó como muy positivo que poco a poco se incluya el recuadro con el intérprete, en este caso, para compartir la información sobre el Covid-19.
Diariamente me esfuerzo para que los sordos que me vean puedan comprender el mensaje de las autoridades. Asumo el compromiso con total profesionalismo.