COSCOMATEPEC, Ver.- La artesanía textil en lana de borrego es una de las actividades que detona la demanda en pedidos para realizar cotones, chalecos, tapetes o bolsas para dama, sin embargo es cada vez menos el interés de las personas por aprender este oficio, por ello Don Juan Morales Librado, quien desde su infancia aprendió a usar el telar, está dispuesto a enseñar y compartir esta tradición.
A los 14 años, recordó que fue la primera vez que se “subió” a un telar de pedal, "fue cansado pero satisfactorio", pues sabía que a este oficio de la artesanía textil le dedicaría toda su vida, y hoy, a sus 82 años y pese a tener problemas de oído, no tiene impedimento para poder expresar desde su corazón lo que este oficio le dejó a lo largo de su vida, pues su abuelo y su papá también dedicaron su vida a estar entre lana de borrego, hilos, cotones, chalecos y tapetes hechos 100 por ciento de la lana del borrego, ya que en el parque recreativo de Coscomatepec el artesano ha encontrado un espacio para enseñar a chicos y grandes esta hermosa tradición.
“Soy bajito y me calzaban para que pudiera subirme al telar y aprendí, desde esos años a la fecha no me bajo de mis queridos telares, hago cotones de diferentes diseños, grecas, dibujos de caballos; el telar se hizo para este parque Recreativo de Coscomatepec y a mí me pidieron el apoyo para enseñar a la gente y aquí estoy”, dijo .
En un recorrido en su área de trabajo, mostró orgulloso las cajas de lana con las que empezará a procesar para tener un hilo y empezar a tejer en el telar; en cajas de color negro tenía la lana blanca, café y negra, pero en sus trabajos finales se podía observar colores como el rosa o naranja, pero estos fueron teñidos a base de colorantes de tela.
Expresó que este oficio ha ido perdiendo el interés de las personas, pues aunque existe la demanda de compra o pedidos de este tipo de ropa, que ahora se considera un lujo por el precio, tiempo, dedicación y diseño, ya no quieren trabajar en el telar.
Para don Juan, con 72 años de experiencia, es importante que las personas que gusten de aprender de este oficio tengan interés, pues "es un trabajo 100 por ciento artesanal y se requiere técnica e imaginación para la realización de diseños que luego los clientes también traen".
Mencionó que le ha tocado realizar cotones para familias enteras, diseños de caballos o escudos de rancherías de la zona centro del estado e inclusive algunas con nombre de quien las porta, tapetes para adorno o accesorios para un área específica de alguna casa.
Don Juan Morales explicó que luego de seleccionar la lana empiezan a realizar los cardados, es decir, la lana del borrego se “separa” a modo de formar una línea gruesa que al pasarse por el torno del telar crea los hilos.
“Puedo saber con la vista si un borrego fue rasurado a los 6 meses, tiempo correcto, pues abro la lana que venden y está sucia; le digo a la gente que esta materia prima tiene más de un año; llevo años conociendo este producto textil, ya que entre más tiempo tenga el borrego, la lana es más difícil de trabajar”, dijo.
El cotón es una indumentaria que también se le conoce como sarape y este lleva un proceso completo de 4 días y puede emplearse hasta 3 kilos de lana en bruto para poder hacerlo; un borrego llega a dar 5 kilos de lana.
Orgullo de lo que ha logrado a sus 82 años comentó que sus trabajos han llegado a estados como Oaxaca, Tabasco, Campeche e inclusive al extranjero, ya que le piden trabajos especiales para mandarlos, pues con las prendas textiles que él realiza "la gente extraña menos su lugar de origen".
Pese a que existen más personas en Coscomatepec dedicadas a este trabajo, Juan Morales Librado es una de las pocas personas que lo hace artesanalmente y que a su edad está dispuesto a dejar conocimientos a las generaciones que vienen, pues con él ya está un joven de 16 años laborando.
Los trabajos que Don Juan hace están dentro del Centro Recreativo de Coscomatepec, sitio abierto para que artesanos compartan sus tradiciones.