Fortín, Ver.- El cielo de Fortín, colindante con el Cerro de las Antenas, ha dejado de ser una pista de despegue para los apasionados de la adrenalina, pues los vuelos de parapentes se han detenido y esto ha mermado al 100% al sector de aventura.
Paulina Sosa Martínez, representante de la Coordinación de Vuelo en Parapente en la zona de vuelo oficial del Cerro de las Antenas, dijo que "hemos tenido pérdidas económicas grandes, ya que el deporte del parapentismo es exclusivo del turismo y de aquellos que gozan del aire y el entretenimiento diferente y de la aventura".
El 100% del sector está afectado, dejando los parapentes de llamativos colores guardados en sus respectivas maletas por una temporada. "Los pilotos están en sus casas esperando a que la pandemia pase y el cielo vuelva a verse con dos o tres voladores, que llaman la atención de los automovilistas cuando transitan por la carretera federal Fortín hacia Ixtaczoquitlán".
Sosa Martínez refirió que desde la primera semana del inicio de la pandemia por Covid-19 se veían normales sus actividades, sin embargo, conforme avanzaron los días de contagio las personas que laboran con ella organizando y agendando los vuelos les notificaron que nadie quería sus servicios.
Al menos 10 personas agendadas en una semana empezaron a cancelar vuelos con la agencia, así como los pilotos adheridos al mismo. “El cerro de las antenas es un parque privado, pertenece a un civil, pero lo que hicimos fue clausurar”.
Confiados de su labor y de las personas que han estado con ellos, dicen que esperarán a que la pandemia pase, pues comprenden la situación de cuarentena y el llamado que las autoridades sanitarias realizaron.
Por su parte, Paola Sosa dice que apoyó su economía cuando estuvo laborando con el INEGI obteniendo un ingreso extra, pero existen otras cuatro personas que también dependen de los vuelos, que al menos a la semana, de lunes a domingo, tenían de 8 a 10 y los fines de semana y temporada vacacional aumentaban.
Como equipo de vuelo de esta ciudad tenían participación en eventos y festivales como el Festival Volare, pero a este último no confirmaron asistencia, ya que era después de la fase 2, por lo que los deportistas del aire empezaron a cancelar su presencia en Orizaba.