Xalapa, Ver.- La ciudadanía cree que el Barzón es un movimiento de deudores, pero nosotros decimos que es uno de pagadores, porque todos los que están aquí, antes de llegar tuvieron un historial impecable en materia de pagos, siempre lo hicieron hasta que se les presentó alguna eventualidad, indica Teresa Carbajal Vázquez, titular del Barzón de Resistencia Civil del Estado de Veracruz.

Señala que al día de hoy tienen espacios de diálogo concreto con instituciones bancarias, pues la labor del Barzón no ha sido de choque sino de sentar a la mesa de diálogo a las instituciones de crédito para lograr acuerdos justos de pago.

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El trabajo a lo largo de 16 años les ha llevado a ganar sentencias que reducen las tasas de interés en la usura, sin embargo los bancos siempre se actualizan y ahora ya hay criterios judiciales que le han dado reversa a los pocos espacios que los deudores han ido ganando, lo que les ha representado retos y una constante por mantenerse a la cabeza en materia de defensa de usuario, indica.

Ahora manifiestan su rechazo a la cobranza delegada, iniciativa que pretende embargar el salario de los trabajadores vulnerándolos en su dignidad, en su autoestima y autosuficiencia, por lo que exigen a los legisladores que pongan atención en este tipo de casos, señala.

Asimismo pide a la ciudadanía hacer un equipo para exigir en conjunto que las cifras de interés bajen, pues no pueden seguir en los niveles que actualmente están, lo que requiere un ejercicio de concientización.

Explica que se ha especializado en la defensa de los deudores, “siempre quise ser abogada y el Barzón me ha dado la doble satisfacción de ejercer mi profesión y ser una luchadora social, defensora de los que menos tienen, lo que lleva un reconocimiento implícito en la lucha y con eso he respondido a la encomienda que una universidad pública como la Universidad Veracruzana le da para ser una persona socialmente útil”, así ha cumplido también con la encomienda familiar que siempre le preparó para ser una persona de servicio, señala.

Se perseguía a los deudores como delincuentes

Abogada de profesión, egresada de la UV, Teresa Carbajal Vázquez, fue becaria de la Fundación todos los semestres y una vez que egresó recibió una invitación para trabajar en un área legal de una institución de crédito, fue ahí donde se encontró con la problemática que tenían las personas para poder pagar y supo de la desesperación por no poder hacerlo.

Entonces procuró acercarse con una organización que en esos momentos se encargaba de recibir los casos, pero que adolecía de defensa jurídica, ahí encontró un espacio y así conoció el Barzón.

“Yo abracé la lucha hace 18 años, en el 2003 o 2004 y posteriormente hubo una fractura ideológica por parte de ese otro movimiento porque no se le daba importancia a dos factores clave en una deuda: la defensa jurídica adecuada en tribunales y la negociación justa del pago.

Fue entonces cuando un grupo de doce personas decidieron fundar el Barzón de Resistencia Civil del Estado de Veracruz, así nace el 23 de noviembre de 2005".

“Eran otros tiempos, las asociaciones civiles no eran perseguidas como hoy, que parece que es un pecado formar parte de la sociedad civil organizada. En aquel entonces estaba la efervescencia del tercer sector porque no eran ni empresarios ni políticos, sino la sociedad civil organizada. Veracruz vivía uno de los momentos más crudos en materia de desalojos y resistieron muchos de ellos”, dice.

En la casa en la que se llevó a cabo la primera asamblea fue desalojada con 300 policías, con equipo de caballería, de granaderos, que perseguía a los deudores como delincuentes.

Eso les dejó la enseñanza y la encomienda de que nunca más se debía dar una situación de esa naturaleza porque había que intervenir a tiempo y a partir de ahí empezó una especialización en el área de defensa de los deudores, apunta.

El Barzón también abrió un área de atención psicológica porque los estragos de la cobranza abusiva son graves en comparación con los cobradores que están preparados para cobrar, pero a los deudores nadie los asesora sobre cómo resistir, sin padecer en su salud, los efectos de una cobranza abusiva, que los pone al borde de un infarto.

Asimismo participó con la secretaría de Relaciones Exteriores y con el alto comisionado de las Naciones Unidas en el diálogo para construir una agenda sobre derechos humanos, el Barzón fue parte de esos foros que se hicieron para que en 2011 la Constitución se reformara y por primera vez se reconociera a los derechos humanos como derecho positivo y aplicable, recuerda.

“Antes de eso, hablar del derecho humano a la vivienda era un sueño, era de un abogado que no conocía el derecho, ahora lo que todos pregonan en las instituciones fue algo que nosotros vimos desde sus orígenes”, concluye al tiempo de concluir que a 16 años, el Barzón es un movimiento de pagadores que reconocen que tienen una deuda, pero que quieren pagar lo justo, mantener sus propiedades y sobre todo su salud física y mental.