Aunque los productos de la Dieta del Maíz: frijol, maíz, chile y calabacitas, se pueden adquirir fácilmente y son productos con precios accesibles, no son consumidos con tanta regularidad debido al ritmo de vida de las familias actuales.
Al trabajar las mujeres todo el día se complica tener una alimentación sana, por lo que se opta por “comida rápida”, comentan amas de casa.
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Crecí comiendo saludable y estoy saludable: Elvira
Doña Elvira Juana Durán Ballesteros, entrevistada mientras escogía sus hortalizas con una marchanta de la zona de Los Sauces, comenta que ella se crió, como la gran parte de los mexicanos con la Dieta del Maíz, “y míreme tengo 68 años y soy sana”.
Originaria de San Andrés Tlalnelhuayoca, aunque lleva más de 40 años viviendo en Xalapa, comenta que su padre tenía una milpa y se sembraba maíz amarillo, rojo y blanco, su familia comía todo lo que se producía en casa.
Había maíz para elaborar todos los platillos que elaboraba su madre; había calabazas, chiles, maíz y frijol fresco.
Todavía ahora, después de muchos años, recuerda que su mamá elaboraba un atole agrio. Recuerda que remojaba el maíz rojo durante una semana para después molerlo en metate o molinillo y se endulzaba con panela y al final le ponía un pedacito de canela.
Este atole que más mujeres debería de hacer ahora para alimentar a sus hijos era nutritivo. “Pero es complicado porque requiere tiempo para elaborarlo y entiendo que ahora las mujeres trabajan y no se pueden dedicar tanto a la cocina, pero podría hacerse un gran esfuerzo para volver a nuestros platillos culturales”.
Además en la milpa de su papá cultivaban chícharos, “esos tiempos los recurso con mucho cariño y amor porque se comía muy rico en nuestra familia”.
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Ella, como una mujer nacida en una comunidad, considera que comer verduras es más sano que gastar en productos industrializados, como sopas instantáneas o refrescos, opinó.
¿Qué se come en la casa de la señora Estela García?
Por su parte, la señora Estela García Hernández, quien vende verduras como calabazas cultivadas en hortalizas, frijol gordo, paquetes de verduras para elaborar la sopa, comenta que sería bueno que más familias opten por sus productos “porque son sanos y baratos. Yo dos tres calabazas grandes por 10 pesos, una bolsa de frijol por 35 pesos, así que no hay pretextos”.
Comenta que en su casa siempre se comen verduras y frutas porque es lo más sano, “nosotros no tenemos dinero para comprar productos caros. Veo que venden en el supermercado los mismos productos, pero en bolsa y muchos más caros”.
Exhorta a los xalapeños a comprar más en los mercados, donde hay productos frescos de la región y no en los supermercados que son verduras que traen de otras entidades y que tienen químicos.
¿Se puede cultivar la propia comida?
Por su parte, Francisco Teoba Salazar, comenta que es originario de Xico y su familia cultiva en su finca la mayoría de los productos que consumen.
Explica que se considera una persona sana, a sus 48 años, porque al ser de una familia campesina consume distintos productos naturales que salen de la tierra de su propiedad.
Indica que no sabía de las propiedades de la dieta del maíz, “pero es obvio que son buenos alimentos porque los hemos consumido por generaciones y en mi familia ha habido personas ancianas que han superado los noventa años.
Indica que puede ver que en esa población hay muchas familias que prefieren gastar en refrescos, cuando pueden darles a sus hijos leche o agua, o compran sopas instantáneas cuando puedan darle a sus hijos una sopa de fideos con verduras. “Es fin si es muy notorio que ahora muchos prefieren productos industrializados”, concluyó.