Xalapa, Ver.- Veracruz es uno de los estados con más racismo a nivel nacional; la violencia o discriminación aplica principalmente en el aspecto físico, en el sexo biológico y en el estrato social, dijo Julio César Perea González, coordinador de Recepción del "V Coloquio Internacional sobre Cambio Social" de la Universidad Veracruzana.
En el mundo, precisó, México sobresale como una de las naciones con más racismo, por ello es necesario estudiar el comportamiento y las bases de la sociedad con el afán de erradicarlo. Otros estados con más racismo son Puebla y Querétaro, según lo que dijo.
Además, es importante concienciar a las personas desde el punto de vista de historiadores, antropólogos, sociólogos y psicólogos, pues sólo de esa manera se podrá hacer a un lado el racismo con todas sus expresiones y variedades, señaló.
El racismo se puede realizar diariamente incluso sin darse cuenta, debido a que se ha adoptado como algo normal.
Basta con decir eres un naco o un indio o que hay que mejorar la raza para incurrir en ese tipo de discriminación
En la entidad, una de sus causas puede ser la migración y el elevado número de habitantes que diariamente conviven y comparten cultura.
Al buscar una de las causas del racismo se han detectado dos ejes principales: el de la escuela y el de la familia, pues se trata de dos núcleos fundamentales para educar y fomentar el respeto por los demás.
El coloquio se realizó en el auditorio de Iniciativa Municipal de Arte y Cultura (IMAC) con la participación de importantes ponentes nacionales y extranjeros, que compartieron sus investigaciones con la intención de evitar que el racismo aumente y pueda ser erradicado.
El coloquio estuvo abierto al público en general y en todo momento se enfocó sobre la discriminación y las afectaciones que causan con tal de que cada vez sean más las personas que decidan no llevarla a cabo.
VAN 500 AÑOS Y MÉXICO NO LOGRA ERRADICARLO
En México se han vivido 500 años de racismo que no ha logrado ser erradicado, porque generalmente es aceptado o permitido por quienes lo padecen, dijo Camilo García Parra, presidente del "V Coloquio Internacional sobre Cambio Social" de la Universidad Veracruzana.
Sostuvo que en pleno siglo XXI y a pesar de la lucha por la equidad aún es latente el racismo, el sexismo y el clasismo, entre otros tipos de discriminación que incluso han llegado a tomarse como algo normal o cotidiano.
El también ponente del coloquio precisó que para que alguno de esos fenómenos sociales existan debe haber un discriminador y un discriminado, aunque generalmente siempre se ve al segundo, que termina por aceptar su condición.
Reiteró que con la conquista de los españoles, hace 500 años, comenzaron los actos de discriminación en el país, pues para ellos los nativos no eran más unos indios.
El racismo, el sexismo, el clasismo, etcétera, son parte inherente de la naturaleza humana; de momento los antropólogos más brillantes nos dicen que surgen cada vez que hay desigualdad y pues la desigualdad es inherente a todas las relaciones humanas
Por medio de su ponencia, explicó la necesidad de trascender por medio del análisis individualista, para que se consideren al discriminador y al discriminado, pues reiteró que tanto tiene responsabilidad uno como el otro.
El racismo y la discriminación se mantienen debido a la desigualdad; lo mismo pasó con la conquista de los españoles, pues a partir de ese momento los invasores no dejaron de señalar a los nativos como indígenas y lamentablemente ese término fue aceptado.