Xalapa, Ver.- La capital del estado de Veracruz merece toda la atención del gobierno estatal y federal y no puede seguir viviendo como en un “pueblote”, aseguró el presidente municipal de Xalapa, Hipólito Rodríguez Herrero, quien indicó que el municipio ha sido castigado por protestar ante la injusticia y la corrupción.
En entrevista para Diario de Xalapa negó que exista un conflicto de su administración con el gobierno estatal que encabeza Miguel Ángel Yunes Linares; sin embargo, apuntó que pese a que es una autoridad pareciera “estar pintado” para la Fiscalía General del Estado como para la Secretaría de Seguridad Pública, que no han atendido los llamados municipales para actuar contra organizaciones que han tomado las instalaciones del Ayuntamiento.
“La fuerza pública a mí no me hace caso, pareciera que estoy pintado (…) Hay organizaciones populares que han ocupado el Ayuntamiento porque vienen a chantajear. Antorcha Campesina vino a secuestrar a los trabajadores, yo puse una denuncia y hasta ahora no ha sido atendida por la Fiscalía”, lamentó.
A poco más de cinco meses de haber asumido el cargo, el mandatario municipal aseguró que “poner orden en la casa” ha consumido buena parte de la energía con la que llegó el equipo de trabajo municipal, toda vez que se tuvieron que realizar ajustes severos en la estructura de la administración municipal y cambios importantes en las dependencias. Detalló que han sido meses muy intensos, ya que heredó un Ayuntamiento con más de 10 sindicatos en los que se repartían compensaciones de manera discrecional y entre los líderes, entre otras anomalías. “Eso generaba una enorme desigualdad y un malestar entre los trabajadores (…) Recibimos una ciudad con muchos rezagos y con una gestión muy atrasada y eso nos llevó mucho tiempo”, dijo.
Sin embargo, expuso que tras más de cinco meses al frente del Ayuntamiento de Xalapa ya se logró generar una nueva administración, toda vez que hace unos días se aprobó en cabildo la nueva estructura organizativa para la capital y se han elevado al rubro de dirección dependencias como Protección Civil, Turismo, Medio Ambiente y Seguridad. “Tuvimos que hacer ajustes muy fuertes en otras áreas que venían operando con relativa eficiencia, pero con muchos problemas de calidad en sus resultados. Se tuvo que hacer una cirugía fuerte en el tema de tesorería, en los temas de desarrollo social y darle un nuevo impulso al área de desarrollo económico”, destacó.
Respecto a los temas prioritarios que demandan los xalapeños, Rodríguez Herrero reconoció que la movilidad, el desabasto de agua y la disposición de residuos sólidos siguen siendo las prioridades para atender en su administración.
En entrevista expuso que uno de los grandes problemas de Xalapa sigue siendo la movilidad y que las consecuencias en torno a ella las padece toda la población. Por ello, indicó, es urgente transitar hacia un nuevo modelo de transporte público, así como promover la inversión en infraestructura pública.
Detalló que pese a que existe un proyecto para la construcción del Eje Vial Oriente que permita despejar el flujo de vehículos en la avenida Lázaro Cárdenas, el problema es la falta de recursos económicos para lograrlo. “Es una arteria que nos va a costar mucho dinero (…) Tiene que ser un fondo intermunicipal porque involucra a Emiliano Zapata, Xalapa y Banderilla, pero beneficia a toda la región”.
Dio a conocer que entre las anomalías detectadas en Xalapa también se encuentran las “calles fantasmas”, es decir, vialidades que de acuerdo con el Registro Público se pavimentaron, pero que en realidad no lo están. Indicó que estas anomalías fueron realizadas en el curso de las dos últimas administraciones y advirtió que esas personas tienen responsabilidad penal por esto, por lo que “tendrán que pagar por peculado”.
Detalló que en el tema de la basura lo ideal es que todos los desechos tengan un proceso de reciclaje o composta y para ello se requiere educar a la ciudadanía para separar los residuos, pero también llegar a acuerdos con los trabajadores de Limpia Pública para hacerlo. “Es un proceso educativo, pero también un proceso organizativo”, dijo.
Rodríguez Herrero recordó que el municipio está por recibir recursos por parte del Banco Interamericano de Desarrollo para adquirir un biodigestor que se encargue de procesar la materia orgánica y composta y convertirla en energía con la que operará el Palacio Municipal y el sistema de alumbrado público. Sin embargo, este programa estaría disponible “si bien nos va” hasta 2020, por lo que se trata de una solución a menor plazo.
A corto plazo, dijo, están por incorporar 10 camiones de basura más al lote que se tiene actualmente para mejorar el sistema de recolección, además de hacer más eficientes las rutas para que todas las colonias puedan contar con este servicio. Detalló que de los 60 camiones con los que cuenta la administración, sólo se trabaja formalmente con 40, ya que 10 están “muy, muy maltratados” y otros 10 tienen que entrar de manera intermitente a los talleres mecánicos. “Hay un grupo de trabajadores, no hemos podido detectarlos, pero es un grupo que ordeña la gasolina (de los camiones), son huachicoleros y esos personajes deben entender que van a ser sancionados severamente si siguen con sus prácticas”.
Por cuanto hace al servicio de agua en Xalapa dio a conocer que ya se está avanzando en las negociaciones ante la Comisión Nacional del Agua para hacer uso de un cuerpo de agua ubicado en Zalayeta, con lo que se garantizaría el abasto del líquido durante 10 años más. Sin embargo, es necesario llegar a acuerdos con el Ayuntamiento de Emiliano Zapata, toda vez que actualmente el agua que este municipio consume es suministrada por la capital del estado, dejando sin este servicio a los propios xalapeños. “De alguna manera yo le estoy entregando agua a un municipio, cuando yo tengo escasez de agua, entonces tenemos que llegar a un buen acuerdo”, dijo.
Finalmente Rodríguez Herrero expuso que en la Comisión Metropolitana de Agua y Saneamiento (CMAS) también se detectaron anomalías heredadas de la administración municipal anterior y que la oscilación de las facturas que pagan los consumidores obedece a un proceso de sabotaje por parte de personas que manipulan los recibos. “Nos ha costado trabajo poner orden porque no puedes correr a todos porque hay gente muy buena, muy trabajadora y muy limpia, pero también hay gente nefasta e identificar eso lleva tiempo”.
