Pese a que los derechos de los peatones se encuentran protegidos en la Ley de Tránsito y Seguridad Vial para el Estado de Veracruz en varias colonias de la capital veracruzana, incluida la zona centro, banquetas se encuentran ocupadas, obstruidas o adaptadas para el comercio.

En las colonias Centro, El Mirador, José Cardel, Reforma, El Maestro, Aguacatal y Encinal se pueden observar banquetas obstruidas o semiocupadas, lo que impide el libre tránsito de las personas.

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De acuerdo con la norma local el peatón o transeúnte es: “La persona que transita por las vías públicas, mediante sus propios medios naturales de locomoción, o en su caso valiéndose de una silla de ruedas o auxiliado por cualquier prótesis, aparato, artefacto o dispositivo ortopédico manejado por ellos o por otra persona”.

Según las cifras de la Secretaría de Salud federal en los últimos cinco años y medio se ha brindado atención a 2 mil 807 peatones lesionados en accidentes de tránsito en clínicas y centros de salud de Veracruz.

¿Cuál es la situación en la zona centro de Xalapa para los peatones?

En las calles Primo Verdad, Enríquez y Clavijero de la colina Centro de su pueden observar casetas y puestos de dulces o revistas que fueron colocados desde hace varios años sobre las banquetas. Ante ello, los peatones ya están acostumbrados a observar estos armazones metálicos que se han vuelto parte de la vida diaria.

La integración de estas casetas a mencionadas banquetas es tal que incluso los transeúntes son quienes adquieren sus productos y, en ocasiones, se detienen a platicar con las personas que atienden, lo que implica que el espacio para quienes transitan por ahí se reduzca.

En algunas de estas áreas, por ejemplo: la de la calle Primo Verdad se cuenta con zonas de pacificación, lo que significa que el peatón puede levantar la mano para poder cruzar y los vehículos deben detenerse.

En lo que respecta a las banquetas de la calle Enríquez y Clavijero la dificultades que se observan son las tarjeas en malas condiciones, levantadas o con algún daño. “Lo que se requiere es tener un poco de mayor control del comercio y evitar que existan tantas casetas que impiden el paso peatonal de manera correcta”, comentó la ciudadana Sara García.

Consideró que, si bien las personas requieren vender sus productos, no requieren ocupar más de la mitad de la banqueta u obstruir el paso.

¿Cuál es la situación en las colonias Mirador y José Cardel?

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En la calle Pípila de la colonia José Cardel se han colocado casetas en las que se venden varios tipos de alimentos en diferentes horarios. Algunas de estas casetas obstruyen casi por completo la banqueta, por lo que los peatones deben bajar de la misma para poder continuar su camino.

La molestia de los transeúntes radica en que en determinadas zonas el recorrido se hace con menores de edad, lo que significa un riesgo para ellos.

“En esta zona no se puede transitar con tranquilidad, siempre tienes que andar esquivando los carros porque la banqueta está obstruida por las casetas y los clientes de las personas que las tienen aquí”, dijo Enrique Viveros, vecino de la zona.

En lo que respecta a la calle 16 de septiembre de la colonia El Mirador algunos vecinos han aprovechado para poder apartas espacios para sus vehículos colocando barras de metal con cemento. Además, se encuentran barras de metal que aparentemente no tienen uso alguno.

En otra de las áreas los postes de energía eléctrica y de empresas de servicios se encuentran a la mitad de las banquetas. Mientras que algunas personas utilizan las banquetas para estacionar sus vehículos, sin importar que ello obstruya o limite el espacio para los peatones.

Desde escaleras a jardineras en las calles

En las calles Brasil y Las Hayas de la colonia Reforma los vecinos del lugar han aprovechado los espacios para colocar escaleras, jardineras y algunos objetos de uso doméstico o comerciales.

Las escaleras en forma de caracol o rectas han sido colocadas con la intención de ser utilizadas para un segundo piso y con ello ahorrar espacio al interior de sus viviendas.

Esta situación impide que los transeúntes transiten con facilidad por las aceras, por lo que deben bajar al arroyo vehicular. Mientras que en las áreas donde son colocados artículos de uso doméstico también se registran algunas complicaciones para los peatones.

“El problema es que se ha permitido a las personas que construyan escaleras y ocupen espacios que le pertenecen a los transeúntes, uno tiene que arriesgarse para poder transitar por este lugar”, manifestó Gladys Salazar, vecina del lugar.

En su opinión, las autoridades deberían poner orden y restringir las mencionadas construcciones.

¿Hay riesgo para la población al circular en banquetas?

Sobre la avenida Lázaro Cárdenas, frente a las instalaciones del Poder Judicial de Veracruz se ubica una parada de autobús en la que han sido colocados varios puestos de venta que impide el libre tránsito de las personas. Aunque arriba de dicha parada de autobuses se encuentra un puente peatonal las personas requieren caminar por el lugar para ingresar a la plaza comercial.

Esta parada es una de las más concurridas de la ciudad, por lo que al cúmulo de puestos se le debe sumar la cantidad de personas que se paran para esperar el transporte público. Ello se vuelve complicado y riesgoso para quienes se bajan de los autobuses, así como para quienes esperan. Los pasajeros que se bajan del transporte en ocasiones quedan sobre la carretera con el riesgo de ser atropellados.

Miriam Gutiérrez es una usuaria del servicio público y señaló que diariamente se tiene la misma situación, debido a que son muchas las personas que acuden a la plaza comercial, a realizar trámites al Poder Judicial de Veracruz o tienen trabajos en la zona.

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“Sí es un riesgo, pero tenemos la necesidad de usar el transporte y venir a esta zona, así que debemos tomar ciertas precauciones, en mi caso, cuando veo que hay muchas personas subo a la parada que está una cuadra arriba, aunque camine, prefiero eso a tener un riesgo”, expresó.