XALAPA, Ver.- Luego de los hechos violentos registrados el pasado día 8 en esta ciudad, donde un grupo de anarquistas causaron destrozos a bienes privados y públicos, el vicario general de la iglesia Catedral, padre Gilberto Suárez Rebolledo, se pronunció ayer al respecto y exigió justica para que los culpables se hagan responsables de sus hechos y paguen los daños ocasionados.
Tras la procesión por algunas calles de Xalapa por la “Solemnidad del Corpus Christi”, el padre Gilberto leyó un escrito en que hacía referencia a los daños causados, especialmente a las iglesias que encontraron a su paso.
El sacerdote inició con una frase: “Xalapa vandalizada”. Posteriormente sacó la hoja y comenzó a leer. Se dirigió al gobernador Cuitláhuac García Jiménez y al alcalde de esta ciudad, Hipólito Rodríguez Herrero. “Este jueves que celebramos de una forma especial la “Solemnidad del cuerpo y sangre de nuestro señor Jesucristo, dada la contingencia sanitaria hemos dado culto a la presencia real de Cristo en la eucaristía junto con nuestro pueblo, al mismo tiempo hemos hecho un acto de desagravio a Dios por la serie de ataques y sacrilegios que han sufrido algunos templos de la Arquidiócesis”.
Agregó: “El pueblo de Dios experimenta tristeza, indignación e impotencia; estas agresiones han alanzado su máxima expresión con lo sucedido al inicio de esta semana; el pasado 8 de junio sucedió una manifestación en esta ciudad en contra de represiones policiacas. Luego de conducirse como una demanda legítima para exigir justicia, la manifestación se salió de control y se convirtió en una expresión de vándalos que iban agrediendo y destruyendo cuanto encontraron en su camino”.
Un pequeño grupo de manifestantes secuestró el centro de la cuidad, rompiendo vidrios dañando negocios y agrediendo iglesias; dañaron la puerta del templo expiatorio, ingresaron al interior y dañaron una imagen religiosa. En la plaza y la catedral hubo destrozos y agresiones
Criticó la postura que tomaron los efectivos policíacos. “Es contradictorio que la turba haya sido resguarda por patrullas de tránsito, mientras que nadie de las fuerzas del orden se hizo presente para detener a los agresores mientras delinquían”.
Continuó diciendo: “Esta es una expresión de grave impunidad que no se puede solapar; lamentamos que ante esta manifestación anárquica no haya habido protocolos de seguridad preventiva y que se haya expuesto a las personas que laboran en sus negocios o caminaban por la calle”.
La Arquidiócesis de Xalapa comparte el malestar, la impotencia y el reclamo que distintos sectores de la sociedad han manifestado en contra de estos comportamientos anárquicos que atentan contra el estado de derecho y afecta la paz social
“Condenamos enérgicamente este tipo de agresiones violentas que sólo abonan a la descomposición social. Lamentamos el proceder de las autoridades encargadas de salvaguardar el orden y la paz social, así como la acción y falsa tolerancia que está poniendo en riesgo la integridad de las personas y la sana convivencia entre ellas”, precisó.
Lamentó que los ataques se están haciendo costumbre, especialmente a sus templos. “Lamentamos profundamente que se esté haciendo costumbre la agresión a nuestros espacios sagrados, así como a otros espacios públicos y privados”.
Por último exigió que los culpables paguen por los daños. “Exigimos que se aplique la ley y se llame a cuentas a los responsables para pagar sus culpas y resarcir los daños causados”, finalizó.