La oportunidad debe ser aprovechada para colocarte en la universidad que reúna las mejores condiciones y hacerlo desde el reconocimiento de tus potencialidades y posibilidades. Eso sólo se puede hacer desde el análisis, la participación, sin prejuicios y con una plena disposición a integrar todos los puntos de vista.
Tu fuerza radica en converger en un proceso de reflexión y debate abierto y colectivo entre las ideas, las propuestas, la energía y ganas para decidir tu destino y participar en el mismo. Y además hacerlo desde la convicción de que lo que te propones pueda favorecer el proceso de cambio que coloque a tu persona en el lugar que le corresponde.