Lidia Tomás había escuchado que el narco en México era muy peligroso, pero ni ella ni su familia pensaron que fuera peor que la delincuencia que vivían en su país de origen, Guatemala. Ella es hermana de Marvín, uno de los migrantes que habrían sido asesinados y calcinados en Camargo, Tamaulipas.
“Nunca pensamos que no lo volveríamos a ver, sabíamos que México es peligroso pero nunca creímos que más que aquí”, afirma en breve entrevista con El Sol de México.
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La semana pasada, las autoridades de Tamaulipas reportaron el hallazgo de 19 cuerpos calcinados. Las primeras investigaciones señalan que los individuos eran migrantes de Guatemala que buscaban llegar a Estados Unidos y los responsables del múltiple homicidio eran integrantes del Cártel del Noroeste (CDN), uno de los grupos criminales más violentos del país según la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).
Lidia accedió a hablar, pero explicó poco, pues tiene miedo de que “los narcos mexicanos” puedan hacerle daño a ella y a su familia tal como lo hicieron con su hermano.
“Nos han recomendado no hablar mucho pues esos narcos son muy poderosos y tememos por nuestra seguridad, pero estamos muy tristes por mi hermano, esperamos aunque sea traer sus restos”, afirmó Lidia.
— ¿Ya enviaron las pruebas de ADN que ha solicitado el gobierno de México?, se le preguntó.
—“Ya mi mamá ya los mandó”, respondió la migrante de Guatemala.
El reporte de autoridades y testimonios recabados en el lugar señalan que el viernes 22 de enero por la tarde ingresó a Santa Anita un comando de pistoleros del CDN para buscar a un mando del grupo rival, el Cártel del Golfo (CDG), la organización criminal que controla la zona de Tamaulipas.
Se menciona que hubo un enfrentamiento y que los sicarios del CDN localizaron a 19 supuestos guatemaltecos a quienes asesinaron en ese lugar, incineraron los cuerpos y los abandonaron en los límites con el estado vecino de Nuevo León. El incidente provocó que las autoridades guatemaltecas exigieran al gobierno mexicano una investigación “exhaustiva” sobre el ataque a fin de dar una respuesta a familiares de las víctimas.
Fuentes guatemaltecas aseguraron a este diario que esperan que sea a partir del próximo lunes cuando los forenses a cargo del caso comiencen a entregar los primeros resultados.
HEREDEROS DE LOS ZETAS
El Cártel del Noreste está en la lista de la DEA como uno de los más sanguinarios de nuestro país. En un informe de 2019, la agencia estadounidense reporta que este grupo criminal surgió de la división al interior de Los Zetas, luego de la captura de su líder absoluto Omar Treviño Morales, conocido como el Z-42, en 2015.
Luego de esa detención hubo una larga disputa por el control de Los Zetas que derivó en la formación de los grupos criminales: Los Zetas Vieja Escuela y el CDN, que quedó bajo el mando de Juan Gerardo Treviño Morales, alias El Huevo.
Según la DEA, El Huevo es considerado el último líder de Los Zetas que se encuentra en libertad.
El CDN ha extendido su zona de dominio a Tamaulipas, -donde disputa el territorio al Cártel del Golfo-, Zacatecas, Nuevo León, San Luis Potosí y Coahuila, en México, pero se cree que ya opera en áreas de Estados Unidos, Guatemala, Honduras y Colombia.
Además del narcotráfico, el CDN participa también en secuestros, extorsiones, robo, tráfico de personas y controla actividades como la prostitución y robos a menor escala.
El CDN también ha logrado convertirse en uno de los más sanguinarios cárteles gracias a su brazo armado, conocido como La Tropa del Infierno. Los integrantes son conocidos por su brutalidad y se dedican a cuidar los intereses del CDN y enfrentar a sus rivales.
El líder de La Tropa del Infierno es un hombre conocido como El Werko, quien se encarga de todos los operativos de la organización y quien estaría casado con una sobrina de Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, alias El Z-4 y El Z-42, respectivamente, quienes actualmente se encuentran en prisión.
Este grupo armado se viste con trajes militares similares a los que usa la Marina Armada de México, se desplaza en vehículos tipo pick up y gusta exhibir el poderoso armamento que utilizan.
También son conocidos por utilizar “las camionetas monstruo”, vehículos blindados de gran tamaño que están dotados de artillería y les permite enfrentar a sus rivales.
Los reportes de la DEA detallan que gran parte del terreno que ha ganado este cártel es debido a su buena organización y al cambio en la estructura jerárquica con la que normalmente trabajaban otros grupos criminales similares.
Se eliminó la figura de jefes de plazas por lo que es El Huevo, quien da órdenes y tiene el control, gracias a los comandantes que tiene asignados en las ciudades.
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