“Cualquier aspirante que resulte triunfador en la encuesta para elegir al candidato de nuestro movimiento aplicará la misma política en favor del pueblo. Está asegurada la continuidad con cambio”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador ayer, durante la concentración por el 85 aniversario de la Expropiación Petrolera en el Zócalo capitalino.
Acompañado de tres de los cuatro presidenciables de Morena—Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López— en el templete desde el que ofreció su discurso, López Obrador hizo un llamado a la unidad frente a las más de 500 mil personas que se concentraron frente a Palacio Nacional.
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La cuarta corcholata, el senador Ricardo Monreal, estuvo en el área de invitados especiales, junto con gobernadores morenistas como su hermano, David Monreal, de Zacatecas; Cuauhtémoc Blanco, de Morelos; Américo Villareal, de Tamaulipas; Marina del Pilar Ávila, de Baja California, así como el líder nacional de Morena, Mario Delgado.
Ricardo Monreal marchó desde la sede del Senado junto a un grupo de personas que le expresaron su apoyo en la búsqueda de la Presidencia en 2024.
También asistieron al evento los precandidatos de Morena a las gubernaturas de Estado de México y Coahuila, Delfina Gómez y Armando Guadiana.
Desde antes del mediodía, miles de personas abarrotaron las calles aledañas al Zócalo para manifestar su apoyo al Presidente y a su Cuarta Transformación.
Agrupados en contingentes por estados, los simpatizantes llegaron a la Plaza de la Constitución donde López Obrador agradeció la presencia de cada una de las entidades al inicio de su discurso.
El Presidente pidió a sus simpatizantes no temer ante el futuro electoral del país y advirtió a sus adversarios que no regresarán al poder.
“Hagan lo que hagan, no regresarán al poder los oligarcas... Continuará prevaleciendo en nuestro querido México una auténtica democracia”.
Al hacer un recuento sobre la Expropiación Petrolera que promulgó Lázaro Cárdenas el 18 de marzo de 1938 y compararla con su movimiento, López Obrador dijo que la historia tiene enseñanzas mayores; la principal, que sólo con el apoyo de las mayorías se puede llevar a cabo una transformación popular.
Reprochó que el Partido Acción Nacional (PAN) nació en septiembre de 1939 criticando la expropiación petrolera, por lo que no permitirá el regreso de una minoría (al poder) a costa de la humillación y el empobrecimiento de las mayorías.
El jefe del Ejecutivo federal reconoció los logros del presidente Lázaro Cárdenas del Río y dijo que fue un mandatario que profesaba un sincero y profundo amor al pueblo y recalcó que con la expropiación de empresas petroleras se comenzaron a devolver bienes nacionales y recursos que desde el Porfiriato se encontraban en manos de extranjeros.
Señaló que tanto campesinos como obreros identificaron al presidente Cárdenas como el defensor de sus intereses. Recalcó que la primera parte de la estrategia cardenista había resultado favorable pues logró la solidaridad de los grupos sociales menos favorecidos con el Presidente.
Hizo una analogía con la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del norte, ahora conocido como T-MEC, en la cual se logró el derecho de nuestro país para defender la soberanía de los energéticos nacionales.
“Me llena de orgullo, hoy 18 de marzo, que a pesar del entreguismo que prevalecía, antes de llegar al Gobierno, pudimos quitar del Tratado de Libre Comercio un amplio tratado que comprometía en ese acuerdo nuestro petróleo y poner en su lugar un pequeño párrafo”, dijo el Presidente.
Personas de todos los estados de la República se congregaron en la plaza pública más importante del país sin que nadie los “acarreara”. Al menos así lo sostuvieron todos los cuestionados al respecto, quienes señalaron que llegaron por sus propios medios a apoyar al presidente López Obrador.
“En transporte”, “rentamos unas combis”, “en metro”, dijeron. Nadie reconoció ser transportado a cambio de cumplir una cuota política o por dinero, aunque sí se pudieron ver pases de lista y grupos uniformados con el nombre de otros políticos ajenos al Presidente.
Diputados, presidentes municipales, grupos sindicales e incluso las corcholatas presidenciales eran parte de la marea de uniformes guinda que abarrotaron las calles aledañas y la plancha del Zócalo.
El ausente en el evento fue el dos veces candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, hijo del expresidente Cárdenas del Río, quien no asistió al Zócalo por atender “otros compromisos”, pero sí fue al monumento a la Revolución —donde reposan los restos de su padre— a colocar una ofrenda floral.
Cárdenas Solórzano, excompañero de partido de López Obrador cuando militaban en el PRD, acusó desaciertos en la política energética de la actual administración, la cual se basa en la extracción y no brinda fondos a la industria petroquímica.
Además señaló que la refinería de Dos Bocas costó tres veces más de lo presupuestado y que no se han modernizado las refinerías existentes en el país.
SOBERANÍA
El Presidente aseguró también que México alcanzará la soberanía petrolera y la autosuficiencia energética para 2024.
“Podemos asegurar que se está garantizando la soberanía petrolera, pues el año próximo no vamos a comprar gasolina y otros petrolíferos en el extranjero, vamos a procesar toda nuestra materia prima”, dijo el mandatario.
Sin embargo, de acuerdo con los datos que difunde la Secretaría de Energía, que encabeza Rocío Nahle, el año pasado, con la reactivación de las actividades productivas en el país, se importó un volumen de 419 mil barriles diarios de petróleo de gasolina, lo que significó un repunte de 22.8 por ciento luego de una disminución de 12 por ciento en 2021 y 26 por ciento en 2020, al declararse la pandemia mundial.
En cuanto al diésel, el Sistema de Información Energética —una plataforma administrada por la Sener— indica que el volumen importado llegó a 174 mil barriles diarios el año pasado, un rebote de 69.7 por ciento tras la reducción de 10 por ciento en 2021, y de 35 por ciento en 2020, cuando el transporte de todo tipo, el más intensivo en el uso de este combustible, se paralizó al declararse el cierre de las actividades productivas.
Sobre el tema, previo al discurso del Presidente, Rocío Nahle dijo que la Refinería de Dos Bocas, Tabasco, es una realidad y un orgullo para todos los mexicanos, y añadió que en este año se dará la primera producción.
Expresó que la política energética del país requería un cambio, que fue el rescate de las refinerías de Pemex que estaban en completo abandono para revertir la importación de gasolina que solamente beneficia a intereses de particulares y de grandes empresas trasnacionales.
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Al hacer un recuento de los logros de esta administración al rescatar el sector energético dijo que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se está transformando para llevar internet para todos de forma gratuita, además de que se nacionalizó el litio.
NACIONALISMO
El Presidente aprovechó también para arremeter en contra de los políticos estadounidenses —principalmente del partido republicano— que buscan declarar terroristas a los cárteles mexicanos para combatirlos con sus fuerzas armadas. Recalcó que los republicanos están acostumbrados a ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Señaló que con Estados Unidos habrá cooperación pero no permitirá sometimiento ni intervencionismo.
Finalmente lanzó vivas por la soberanía energética y por los trabajadores de la industria petrolera nacional. Con información de Alfredo Fuentes, Gloria López y Abyee Vargas y Fernando Merino
