/ domingo 21 de julio de 2024

México mantiene una posición ambigua frente a China: Instituto México Wilson Center

El estudio del Instituto México del Wilson Center dice que EU podría presionar para fijar una relación con el país asiático

Desde hace dos décadas, México ha adoptado una postura deliberadamente ambigua en su relación con China, lo que ha permitido tener una buena relación con el gigante asiático sin enemistarse con Estados Unidos, refiere el estudio The triangular balance: Mexico, the United States and China, divulgado este mes por el Instituto México del Wilson Center.

Sin embargo, ese delicado equilibrio podría comenzar a alterarse este año, cuando el tema suba a las campañas electorales de Estados Unidos y se pidan posturas más claras a los países aliados; asimismo, el próximo año inician los preparativos para la revisión del Tratado comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), donde es probable que se establezcan cláusulas que limiten las relaciones con el gigante asiático.

“México no ha desarrollado una posición clara frente a Beijing, en ninguno de los sentidos (amistosa o confrontativa), pero hasta ahora ha mantenido el statu quo para proteger sus intereses sin poner en riesgo su relación con Washington”, refiere el estudio.

No obstante, alerta el documento, “las discusiones en México sobre China están constantemente influenciadas por el clima político en Estados Unidos. Es innegable que las perspectivas de Estados Unidos sobre la postura de México (o la falta de ella) hacia China pueden radicalizarse a medida que se acerquen las elecciones estadounidenses”.

En medio de la hostilidad entre Estados Unidos y China, que ha propiciado la reorganización mundial de cadenas de producción y la relocalización de inversiones, sería esperable que Washington pretenda obligar a México a tomar distancia de China.

“Si el próximo presidente de Estados Unidos intenta imponer sus deseos a México, bajo la premisa de que el país es demasiado dependiente del mercado estadounidense, se arriesga a una respuesta nacionalista de México, poniendo en peligro la integración económica y quizá poniendo en riesgo la colaboración para otras áreas vitales para Washington, como la migración y la cooperación antidrogas”, advierte el estudio elaborado por Juan Carlos Backer.

Foto: Reuters

La antesala para que los nuevos gobiernos de México y Estados Unidos se sienten a la mesa para analizar las estrategias a seguir respecto a China están llenas de mensajes contradictorios.

Según el texto, la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, y el de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, han tomado decisiones políticas que sugieren una desaprobación de ciertas prácticas comerciales de empresas chinas.

Estas políticas, sin embargo, coexisten con invitaciones abiertas a empresas chinas para invertir en el país y con llamadas de cortesía a funcionarios chinos. “El presidente López Obrador se reunió con funcionarios chinos y la presidenta electa Sheinbaum se reunió con el embajador chino en México casi inmediatamente después de su victoria electoral, quien le entregó una carta del presidente Xi Jinping”, apunta la investigación.

Esta incertidumbre percibida desde Estados Unidos es un arma de doble filo, plantea el documento del Wilson Center. Por un lado, una alternativa para Estados Unidos sería participar de una manera más cooperativa con su socio del sur, considerando que China está tratando de mejorar activamente su relación con México y ha insistido en los beneficios tangibles que podría ofrecerle su Iniciativa de la Franja y la Ruta.

“Washington no puede esperar de manera realista que México simplemente rechace estos beneficios potenciales y rechace cualquier compromiso con China. En cambio, Estados Unidos debería aspirar a ofrecer alternativas competitivas y participar en proyectos colaborativos que destaquen las ventajas de asociarse con empresas y tecnologías estadounidenses en el marco del TMEC”, plantea Baker.

Joe Biden, presidente de EU. Foto: EFE

Pero la respuesta de la Casa Blanca también podría ser más hostil. “No es difícil imaginar que Estados Unidos propondría ampliar el espíritu del artículo 32.10 del T-MEC a otras latitudes.

Por ejemplo, se podría sugerir que para ingresar al mercado estadounidense libre de impuestos, además de cumplir con las reglas de origen aplicables y cumplir con todos los demás requisitos relacionados, sería necesario demostrar que la empresa que fabricó dichos productos no proceden de un ‘país sin mercado’”, es decir, de China.

Para José Luis Bernal, exembajador de México en China, el reto es desplegar una estrategia diplomática muy fina, donde México deje en claro que no se involucra en el conflicto sistémico entre Estados Unidos y China, y que se ajustará a las reglas internacionales de comercio para defender sus intereses.

➡️ Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante

En entrevista con El Sol de México, Bernal expuso que “México debe aprovechar bien su posición geográfica, su fortaleza económica y su capacidad de diálogo con Estados Unidos, pero también con China, para atraer estas inversiones. Y con eso, no estamos creando un conflicto”.

Entre las conclusiones del estudio del Wilson Center se establece que, lejos de ser un factor de discordia, China puede ser un “pegamento” para fortalecer la integración de América del Norte.

Desde hace dos décadas, México ha adoptado una postura deliberadamente ambigua en su relación con China, lo que ha permitido tener una buena relación con el gigante asiático sin enemistarse con Estados Unidos, refiere el estudio The triangular balance: Mexico, the United States and China, divulgado este mes por el Instituto México del Wilson Center.

Sin embargo, ese delicado equilibrio podría comenzar a alterarse este año, cuando el tema suba a las campañas electorales de Estados Unidos y se pidan posturas más claras a los países aliados; asimismo, el próximo año inician los preparativos para la revisión del Tratado comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), donde es probable que se establezcan cláusulas que limiten las relaciones con el gigante asiático.

“México no ha desarrollado una posición clara frente a Beijing, en ninguno de los sentidos (amistosa o confrontativa), pero hasta ahora ha mantenido el statu quo para proteger sus intereses sin poner en riesgo su relación con Washington”, refiere el estudio.

No obstante, alerta el documento, “las discusiones en México sobre China están constantemente influenciadas por el clima político en Estados Unidos. Es innegable que las perspectivas de Estados Unidos sobre la postura de México (o la falta de ella) hacia China pueden radicalizarse a medida que se acerquen las elecciones estadounidenses”.

En medio de la hostilidad entre Estados Unidos y China, que ha propiciado la reorganización mundial de cadenas de producción y la relocalización de inversiones, sería esperable que Washington pretenda obligar a México a tomar distancia de China.

“Si el próximo presidente de Estados Unidos intenta imponer sus deseos a México, bajo la premisa de que el país es demasiado dependiente del mercado estadounidense, se arriesga a una respuesta nacionalista de México, poniendo en peligro la integración económica y quizá poniendo en riesgo la colaboración para otras áreas vitales para Washington, como la migración y la cooperación antidrogas”, advierte el estudio elaborado por Juan Carlos Backer.

Foto: Reuters

La antesala para que los nuevos gobiernos de México y Estados Unidos se sienten a la mesa para analizar las estrategias a seguir respecto a China están llenas de mensajes contradictorios.

Según el texto, la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, y el de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, han tomado decisiones políticas que sugieren una desaprobación de ciertas prácticas comerciales de empresas chinas.

Estas políticas, sin embargo, coexisten con invitaciones abiertas a empresas chinas para invertir en el país y con llamadas de cortesía a funcionarios chinos. “El presidente López Obrador se reunió con funcionarios chinos y la presidenta electa Sheinbaum se reunió con el embajador chino en México casi inmediatamente después de su victoria electoral, quien le entregó una carta del presidente Xi Jinping”, apunta la investigación.

Esta incertidumbre percibida desde Estados Unidos es un arma de doble filo, plantea el documento del Wilson Center. Por un lado, una alternativa para Estados Unidos sería participar de una manera más cooperativa con su socio del sur, considerando que China está tratando de mejorar activamente su relación con México y ha insistido en los beneficios tangibles que podría ofrecerle su Iniciativa de la Franja y la Ruta.

“Washington no puede esperar de manera realista que México simplemente rechace estos beneficios potenciales y rechace cualquier compromiso con China. En cambio, Estados Unidos debería aspirar a ofrecer alternativas competitivas y participar en proyectos colaborativos que destaquen las ventajas de asociarse con empresas y tecnologías estadounidenses en el marco del TMEC”, plantea Baker.

Joe Biden, presidente de EU. Foto: EFE

Pero la respuesta de la Casa Blanca también podría ser más hostil. “No es difícil imaginar que Estados Unidos propondría ampliar el espíritu del artículo 32.10 del T-MEC a otras latitudes.

Por ejemplo, se podría sugerir que para ingresar al mercado estadounidense libre de impuestos, además de cumplir con las reglas de origen aplicables y cumplir con todos los demás requisitos relacionados, sería necesario demostrar que la empresa que fabricó dichos productos no proceden de un ‘país sin mercado’”, es decir, de China.

Para José Luis Bernal, exembajador de México en China, el reto es desplegar una estrategia diplomática muy fina, donde México deje en claro que no se involucra en el conflicto sistémico entre Estados Unidos y China, y que se ajustará a las reglas internacionales de comercio para defender sus intereses.

➡️ Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante

En entrevista con El Sol de México, Bernal expuso que “México debe aprovechar bien su posición geográfica, su fortaleza económica y su capacidad de diálogo con Estados Unidos, pero también con China, para atraer estas inversiones. Y con eso, no estamos creando un conflicto”.

Entre las conclusiones del estudio del Wilson Center se establece que, lejos de ser un factor de discordia, China puede ser un “pegamento” para fortalecer la integración de América del Norte.

Local

Gobierno federal hace a un lado la reforma fiscal y presiona a empresas formales, acusan líderes

Exponen que aunque no hay una reforma fiscal, en esta nueva administración hay cambios tendientes a cobrar más a los formales

Local

Con fe recorren horas de camino: Peregrinos narran los milagros de Guízar y Valencia [Fotos]

Cada 24 de octubre la Iglesia católica de Xalapa celebra a San Rafael Guízar y Valencia, el primer obispo mexicano en ser canonizado

Local

6 meses con miedo y sin hogar; vecinos en Ruiz Cortines siguen esperando justicia tras colapso

Indican que son varias las familias que claman ayuda de la autoridad municipal o de la Fiscalía, pero "se levan las manos", lamentan

Cultura

235 entierros prehispánicos se han descubierto en Veracruz: MAPA de donde se ubican

Entierros prehispánicos en Veracruz muestran una gran diversidad en los rituales funerarios relacionados con diversos factores

Doble Vía

¿Qué artesanías venden en el Malecón de Veracruz? Estos son los más buscados por turistas

Desde llaveritos hasta café, puros o vainilla papanteca, en el Malecón de Veracruz puedes encontrar el recuerdito ideal

Celebridades

Teté Espinoza pone en alto a Veracruz en serie de Netflix; así llegó a la fama desde Orizaba

La joven actriz habló sobre su vida en el Colegio Preparatorio de Orizaba y su última participación en la serie "El Secreto del Río"