“¡Ni dependencia, como lo fue el PRI ante el Gobierno, ni corrientes con financiamiento ajeno como las del PRD, porque ello significaría la muerte de Morena!’’, dijo tajante el catedrático de la UNAM, investigador y fundador de esa organización política,el doctor Jaime CárdenasGracia.
—¿Pero hay un liderazgo del actual Presidente Electo de México en Morena?
—Sí, es indudable, acepta el entrevistado por El Sol de México.
Él –López Obrador– es el fundador, el líder indiscutible del movimiento, del partido; todos lo respetamos, todos lo queremos, “pero Morena debe tener una vida de autonomía, de cierta distancia con el Gobierno, de crítica cuando el Gobierno se aparte de la línea ideológica del partido; de acercamiento y de apoyo cuando sea necesario, pero que no sea Morena una correa de transmisión automática de lo que el líder requiera.
Morena debe tener una actitud muy responsable, una actitud de partido político independiente, que al mismo tiempo apoya, pero también que cuestiona, con respeto, sin obstruir, sin dañar, pero sin llegar a una comparsa.
“Morena no puede parecerse al PRI ni al PRD, de este último, en el sentido de tener corrientes propias que sean financiadas por vías diferentes a las del partido, corrientes que demanden cuotas de cargos, dirigentes, de elecciones o gubernamentales’’.
Cárdenas Gracia aclara: es una inquietud de un militante de Morena, que no quiere que su partido sea una copia del PRI, que tampoco quiere que tome o que aprenda los malos ejemplos del PRD, sino que sea un partido distinto, democrático, transparente; es a lo que aspiramos.
“Morena debe huir de esos dos modelos de partido que son inconvenientes: el PRI como dependencia del Gobierno y del PRD con corrientes que obstruyen el papel de liderazgo dentro de esa organización política, enfatiza el académico.
Por ello, dijo que espera que Morena tenga una actitud de independencia del gobierno, de autonomía y que tenga un funcionamiento más democrático.
Al respecto apuntó que deben repensarse los actuales métodos de nombramientos de dirigentes o de candidatos, vía encuestas, vía sorteos; hay que pensar en sistemas de democracia con votos, con primarias, ya sea una elección directa o indirecta, que voten los del padrón electoral en cada circunscripción, en cada distrito o circunscripción que corresponda.
“También Morena había sido un partido férreo opositor a la reelección. Yo fui diputado constituyente en la Ciudad de México y nos opusimos a la reelección legislativa y a la reelección de alcaldes, por lo que no podemos ser “farol de la calle y obscuridad de la casa’’.
“Si nos vamos a oponer a la reelección, nos oponemos a la reelección en todos los ámbitos, no solo en el Congreso, sino también al interior del partido.
Por otra parte, el tema del centralismo, esta facultad de nombrar, que está en el estatuto, pero nombrar desde el centro a dirigentes estatales; cada estado bajo un procedimiento democrático debe elegir a sus dirigentes, refrenda el entrevistado.
—¿Es fundador de Morena?
—Soy militante de Morena, soy fundador.
—Pero, fue diputado federal del PT
Sí, pero nunca fui miembro del Partido del Trabajo, era externo y en esa época no existía Morena. En ese grupo parlamentario éramos 13, siete eran petistas de militancia y ocho, entre ellos Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez, Gerardo Fernández Noroña, Mario Di Costanzo, Teresa Guadalupe Reyes, Laura Itzel Castillo, no éramos petistas, simpatizantes de López Obrador y el PT nos dio la oportunidad de participar como candidatos. Ajenos al PT.
—¿Por qué Morena evita las corrientes internas?
El PRD es muy mal ejemplo, por eso no crear corrientes, inclusive en los estatutos de Morena están prohibidas las corrientes, no deben existir y mucho menos corrientes que tengan financiamiento propio, corrientes que exijan cuotas de poder. En eso hay razón, pues significaría la muerte de Morena, el parecernos al PRI y ser una dependencia del gobierno.
—Ha sido cercano a López Obrador, pero no participó en elecciones.
Me invitaron pero en ese momento tenía tareas en la UNAM, pero seguimos al tanto de lo que ocurre, participo, aunque no electoralmente. Le tengo un gran aprecio personal y político al licenciado López Obrador; no es un problema de distanciamiento, estoy con Morena y con él, pero quiero que Morena sea distinto a lo que fue el PRI en el pasado y a lo que fue el PRD. Eso es todo. Una señal de alerta.