El presidente electo Andrés Manuel López Obrador exigió a los consejeros, legisladores electos y funcionarios de Morena no encaramarse en el poder ni abrir la puerta a las “lacras políticas” que destruyan al partido.
Atestó, desde el Deportivo Reynosa, en la Delegación Azcapozalco, “no vamos a decepcionar a nadie como ha sucedido con movimientos que han creado grandes expectativas y se han desvanecido”, dijo el Presidente Electo de México.
Subrayó que ahora sí el cambio va a fondo y el gobierno surgido de Morena dedicará “toda su atención en implementar un auténtico estado democrático de derecho, en acabar con la corrupción, además de la impunidad”.
Expuso que el Presupuesto de Egresos de la Federación debe garantizar la austeridad del gobierno para liberar fondos para los objetivos de su administración. Reconoció que él junto con sus seguidores sienten que la victoria es todavía un sueño.
En su primera aparición con el Consejo de su partido desde que ganó las elecciones, el ahora presidente electo aseguró a sus correligionarios que, no van “a actuar como dirigentes que al llegar al poder se traicionan a sí mismos y traicionan a sus seguidores”, aseveró al recordar que “en el año 2000 se apostó a la alternancia y todo terminó en una farsa dañina”, porque en lugar de cambiar al régimen, dijo, “se le restauró con la simulación que significó el PRIAN para causar mayores estragos en los últimos tres sexenios”, criticó Obrador, y afirmó que el cambio que emprenderá desde el 1 de diciembre será radical.
“En combatir la desigualdad y la pobreza, y en fortalecer valores culturales, morales y espirituales” y reiteró que no ha desperdiciado el tiempo y no va a perder el impulso que obtuvo en las pasadas elecciones, y por ello recordó que ya tiene perfilados sus equipos de gobierno y está diseñando los proyectos para implementar sus políticas de gobierno.
Aseguró que se va a respetar la voluntad del pueblo y “vamos a poner orden”, convirtiendo como delitos graves el robo del presupuesto y también el robo de gasolinas y energéticos; así como la emisión de facturas falsas y compra de votos para favorecer a partidos y candidatos.
Agradeció el trabajo de diputados y senadores que desde hace tres años ayudaron en la organización de la victoria y señaló que fue ejemplar que no traicionarán el trabajo del movimiento.