¿Disminuir o no regidores en los cabildos municipales y alcaldías? Esa fue la pregunta que discutieron los panelistas durante el primer foro del parlamento abierto para analizar la reforma político-electoral enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador al Congreso de la Unión, así como 49 propuestas más enviadas por diversos diputados y partidos políticos.
Durante el primer foro que arrancó el martes 26 de julio, con el tema “Integración de ayuntamientos municipales y alcaldías de la Ciudad de México”, se externaron diversas opiniones en pro y contra sobre uno de los planteamientos de la iniciativa presidencial: reducir los integrantes de los ayuntamientos al establecer un límite de hasta nueve regidores de forma proporcional a la población de cada municipio.
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Para entrar de lleno al tema vale la pena recordar que el órgano máximo de autoridad en un municipio es el cabildo, integrado por el presidente municipal, un secretario del ayuntamiento, regidores y síndicos. Las funciones de los regidores son vigilar que se cumplan los acuerdos y disposiciones del cabildo, así como informar y acordar con el presidente municipal sobre los asuntos pendientes en las comisiones, además de presentar los dictámenes que correspondan a su comisión de los asuntos a tratarse en las sesiones de cabildo, y votar los temas a tratar.
En este sentido, durante el primer foro de la reforma político-electoral Carolina del Ángel Cruz, consejera del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECDMX), consideró que la iniciativa presidencial lastima el tema del federalismo y, tal vez, se está abonando a la destrucción de lo mucho construido en este país.
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Refirió que en primera instancia vale la pena señalar que la propia Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 115, ya regula que los municipios tengan el número de sindicaturas y regidurías que la propia ley local determine.
Esto es así en función de la propia naturaleza del municipio libre, figura que surgió de la lucha revolucionaria consagrada en la Constitución, que le da al municipio esa característica de libre.
Por su parte, Jaime Miguel Castañeda Salas, especialista en Derecho Constitucional, apoyó la propuesta por un tema de austeridad y por estar conectada también con el asunto democrático.
“Yo retaría a bastantes, incluso, a diputados, los retaría a que nos dijeran todos los límites de sus distritos y ahora que viene la redistritación y que ya se aprobó, por ejemplo, la redistritación aquí en la Ciudad de México, cómo están finalmente demarcados, eso no ocurre con los municipios. Y, ¿por qué lo digo? Porque la reforma toma como base al municipio y lo utiliza para catapultar la idea de base democrática que tiene”.
Advirtió que la democracia interna en los ayuntamientos es fundamental para reconocer en realidad cuál es la verdadera base del Estado mexicano.
La presidenta municipal de Minatitlán Veracruz, Carmen Medel Palma, manifestó que con el diseño actual prevalece la ausencia de compromiso de los regidores y síndicos con la gente, no hay cercanía con las personas candidatas a estos puestos, pues solo se crea la generalización del voto para los presidentes municipales.
Si bien se fortalece la figura del presidente municipal en la sociedad y frente a los demás integrantes del cabildo, el municipio debilita su capacidad de decisión en temas importantes o de interés de la ciudadanía, lo que da pie a la prevalencia de los intereses privados o de sus partidos políticos, indicó la alcaldesa de Morena.
Asimismo, dijo que no se promueve la exigencia de rendición de cuentas a los integrantes del cabildo, y como resultado se concentra la atención en los actos del presidente municipal.
Por ello considero muy acertado valorar la disminución de estos funcionarios, sin perjudicar a las minorías políticas. “Si bien no hay paradigma que indique que a mayor número de regidores y de síndicos, hay mayor progreso en las comunidades, sí estamos ciertos que sí habrá un beneficio al erario público”, dijo.
En el marco del foro para la reforma electoral, el vicecoordinador del PT, Benjamín Robles Montoya señaló que la iniciativa enviada por el Ejecutivo responde a una idea de austeridad y funcionalidad.
“Una vez más ha quedado demostrado que la oposición en el Congreso mexicano miente. A lo largo de este sexenio han dicho que el presidente, López Obrador quiere reelegirse, que quiere desaparecer los organismos autónomos, que quiere desaparecer el INE, para controlarlo, como lo hacía el viejo régimen y cada una de esas mentiras se han ido cayendo, poco a poco, una a una”, reiteró.
Insistió en que la reestructuración que se propone busca, precisamente, garantizar una representatividad política en la que se incluirá también espacios para las representaciones minoritarias, en función del número de habitantes.
La diputada Esther Berenice Martínez Díaz (Morena) señaló que la reforma electoral propone una reducción a los costos municipales, considerando que de los dos mil 446 municipios, dos mil 88 observarían una reducción de los costos en los cabildos.
En tanto, la diputada Alma Delia Navarrete Rivera, también de Morena, dijo estar de acuerdo con la reducción de los integrantes de los ayuntamientos. “No tiene que ver con trastocar el derecho a la representación proporcional que tenemos y es un derecho de los mexicanos; más bien tendría que ver con que los que fueran integrantes de ayuntamientos fueran los mejores hombres y mujeres, con verdadero sentido de servicio y representar a los ciudadanos”.
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