Un paquete de reformas para fortalecer la actuación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en la supervisión de la cadena de producción y comercialización de los hidrocarburos y para evitar que los gasolineros o distribuidores adquieran combustibles robados se aprobó hoy el Senado de la República.
Con 69 votos a favor, 18 en contra y dos abstenciones se aprobó en lo general y en lo particular esta reforma que fortalece las facultades de las autoridades fiscales en el combate al “huachicoleo” u ordeña de ductos de Pemex así como la distribución y venta de combustible robado, incluso en gasolineras establecidas.
Se contemplan reformas al Código Fiscal de la Federación, a la Ley Aduanera, al Código Penal Federal y a la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos cometidos en materia de Hidrocarburos. Se remitió al Ejecutivo federal.
Como preocupante consideró la senadora Dolores Padierna (PT-Morena) la tendencia al incremento de este delito. En tanto en 2015 se localizaron 5,252 tomas clandestinas; en 2016 fueron 6,873 y a finales de 2017 se acumularon 9 mil.
Para el senador Jorge Aréchiga (PVEM) las pérdidas anuales de Pemex por el robo de combustibles alcanzaron 30 mil millones de pesos el año pasado.
Esto significa pérdidas de 82 millones de pesos diarios, complementó el senador sin partido Luis Armando Melgar. Esto equivale a construir por lo menos 20 hospitales, dijo el senador chiapaneco.
El dictamen habla de “fortalecer y uniformar los mecanismos de supervisión y control de toda la cadena de producción y comercialización de los hidrocarburos”, pero dice además que no aplica para las empresas extranjeras que operan en el país.