El balón rodó en San Lázaro y los fanáticos parlamentarios se despojaron del saco y corbata para lucir sus playeras a rayas del Monterrey y los Tigres universitarios. “Una final inédita”, dijo el diputado federal del PRD Agustín Basave, seguido por otros regios del PAN y PRI que departían sonrisas y aplausos.
Contagiados por la final de futbol entre esas dos escuadras, se presentaron ante las cámaras de medios para expresar sus preferencias. Y contrario a las priístas que semanas atrás gritaron el “eeehhh puto”, esta vez los pamboleros dejaron salir “su otro yo” para vivir, sentir, demostrar y expresar sus preferencias y anhelos.
Conminaron a la afición a disfrutar en paz la disputa del campeonato de liga del balompié mexicano y dar ejemplo de que la civilidad en los estadios sí es posible.
“Gozar este clásico histórico” y evitar la violencia dentro y fuera del estadio, fue la petición de los fanáticos parlamentarios que en cada expresión dejan ver su gusto por ese deporte de masas, pasión y emoción, el más popular y arraigado entre la afición mexicana.
“Un mensaje a la gente, particularmente a la afición, para pedirles que gocen este clásico histórico, que se estresen, griten, lloren, rían, pero que no lleguen a la violencia”, apuntó Basave Benítez (PRD).
Recordó que esta es la primera vez que estos dos equipos de Nuevo León llegan a la final.
El partido de ida se jugara este jueves y el de vuelta se llevará a cabo el próximo domingo, a las 18:00 horas.