En el lejano 1985 el 29% de los hombres que se convirtieron en padres en México no habían acabado la primaria, mientras que una proporción casi igual tenía menos de 25 años.
La demografía de los padres mexicanos ha cambiado de manera importante, pues la edad a la hora de paternidad se ha movido más hacia los finales de los 20 y principios de los 30, además de que la escolaridad más común es ahora la secundaria o preparatoria terminada.