El Gobierno de España anunció hoy que notificó al embajador de Corea del Norte en Madrid, Kim Hyok Chol, que debe abandonar el país antes de finales de mes, una expulsión que responde a las reiteradas pruebas balísticas de Pyongyang y a su programa nuclear.
"El Gobierno (...) había advertido reiteradamente al embajador y a las autoridades coreanas que los incumplimientos graves de sus obligaciones y los reiterados ensayos nucleares y balísticos iban a tener consecuencias en nuestras relaciones bilaterales", dijo a los periodistas el ministro de Exteriores español, Alfonso Dastis.
"Hemos llegado a la conclusión de que era necesario tomar este paso porque claramente dichos programas son una seria amenaza para la paz y seguridad internacional", aseveró el ministro desde Nueva York, donde se encuentra para participar en la Asamblea General de la ONU.
La decisión tomada por el Gobierno español se produce tres días después de que Pyongyang lanzara un nuevo misil que sobrevoló el norte de Japón y cayó en aguas del Pacífico, a unos 2.000 kilómetros del territorio nipón.
Corea del Norte ignoró así las repetidas peticiones de gran parte de la comunidad internacional de abandonar sus pruebas balísticas y su programa nuclear, que han venido acompañadas de fuertes amenazas por parte de EE.UU.
España puso hoy de relieve en un comunicado del Ministerio de Exteriores que estas demandas a Pyongyang "han sido contestadas con el desafío continuo de sus autoridades", y subrayó que los constantes lanzamientos son una "violación de las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas".
El Gobierno español ya había condenado en varias ocasiones las actividades militares de Corea del Norte, y además había convocado el pasado 31 de agosto a Kim Hyok Chol, a quien le comunicaron la decisión de reducir de tres a dos el número de su personal diplomático en Madrid.
España se une con la decisión de hoy a otros países que han decidido expulsar a sus embajadores norcoreanos, como Perú, que declaró persona non grata al diplomático Kim Hak-chol el pasado lunes, y México, que tomó la misma medida con Kim Hyong Gil hace 10 días.
Por su parte, EE.UU., que ha amenazado en repetidas ocasiones a Pyongyang y lidera en la ONU los esfuerzos para imponer sanciones, elogió "la decisión del Gobierno de España de tomar esta medida para incrementar la presión sobre el régimen de Corea del Norte".
El Gobierno de España anunció hoy que notificó al embajador de Corea del Norte en Madrid, Kim Hyok Chol, que debe abandonar el país antes de finales de mes, una expulsión que responde a las reiteradas pruebas balísticas de Pyongyang y a su programa nuclear.
"El Gobierno (...) había advertido reiteradamente al embajador y a las autoridades coreanas que los incumplimientos graves de sus obligaciones y los reiterados ensayos nucleares y balísticos iban a tener consecuencias en nuestras relaciones bilaterales", dijo a los periodistas el ministro de Exteriores español, Alfonso Dastis.
"Hemos llegado a la conclusión de que era necesario tomar este paso porque claramente dichos programas son una seria amenaza para la paz y seguridad internacional", aseveró el ministro desde Nueva York, donde se encuentra para participar en la Asamblea General de la ONU.
La decisión tomada por el Gobierno español se produce tres días después de que Pyongyang lanzara un nuevo misil que sobrevoló el norte de Japón y cayó en aguas del Pacífico, a unos 2.000 kilómetros del territorio nipón.
Corea del Norte ignoró así las repetidas peticiones de gran parte de la comunidad internacional de abandonar sus pruebas balísticas y su programa nuclear, que han venido acompañadas de fuertes amenazas por parte de EE.UU.
España puso hoy de relieve en un comunicado del Ministerio de Exteriores que estas demandas a Pyongyang "han sido contestadas con el desafío continuo de sus autoridades", y subrayó que los constantes lanzamientos son una "violación de las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas".
El Gobierno español ya había condenado en varias ocasiones las actividades militares de Corea del Norte, y además había convocado el pasado 31 de agosto a Kim Hyok Chol, a quien le comunicaron la decisión de reducir de tres a dos el número de su personal diplomático en Madrid.
España se une con la decisión de hoy a otros países que han decidido expulsar a sus embajadores norcoreanos, como Perú, que declaró persona non grata al diplomático Kim Hak-chol el pasado lunes, y México, que tomó la misma medida con Kim Hyong Gil hace 10 días.
Por su parte, EE.UU., que ha amenazado en repetidas ocasiones a Pyongyang y lidera en la ONU los esfuerzos para imponer sanciones, elogió "la decisión del Gobierno de España de tomar esta medida para incrementar la presión sobre el régimen de Corea del Norte".